lunes, 11 de agosto de 2008

China se lleva la presea de oro en clavados sincronizados de trampolín

Pekín, 10 de agosto. Las chinas Guo Jingjing y Wu Minxia ganaron, ante un público entregado, la medalla de oro en clavados de trampolín de 3 metros sincronizados, por delante de las parejas de Rusia y Alemania.
Guo Jingjing, de 26 años, que domina por completo el trampolín de 3 metros desde 2001, con tres títulos olímpicos y ocho mundiales en individual y sincronizado, y Wu Minxia, de 22 años, enfrentarán la prueba individual, en la que son respectivamente campeona y subcampeona olímpicas.
Las chinas (343.50 puntos) apenas dieron opciones a las rusas Julia Pakhalina y Anastasia Pozdnyakova, medallistas de plata (323.61), y a las alemanas Ditte Kotzian y Heike Fischer, que se llevaron el bronce (318.90). Detrás se ubicaron Estados Unidos (314.40), Australia (311.34), Italia (296.70), Ucrania (293.10) y Gran Bretaña (278.25).

Genocidio, un crimen de la indiferencia mundial

Cuando en pleno exterminio nazi de los judíos, en 1944, se acuñó el término genocidio y, cuatro años después, la Organización de Naciones Unidas lo tipificó como un delito internacional, el siglo XX ya había sido testigo del asesinato colectivo de dos pueblos: un millón 500 mil armenios sucumbieron entre 1915 y 1918 ante el nacionalismo turco, y 7 millones de ucranianos murieron de hambre entre 1932 y 1993, por desafiar al régimen centralista de Josef Stalin.Pero más allá de la falta de tipificación legal, la inacción de las potencias que hubieran podido detener estos crímenes masivos, propició que se gestara un nuevo y atroz episodio. Según Philip Gavin, profesor de la Universidad de Boston y autor del libro Genocidio en el siglo XX, hubo “alguien” que tomó nota puntual del abandono de los Aliados. En 1939, cuando Adolfo Hitler ordenó a sus generales invadir Polonia, les dijo que mataran sin piedad a todos los hombres, mujeres y niños de raza polaca, para ganar el espacio vital que requerían los alemanes. Y recordó: “¿Quién habla hoy en día todavía de los armenios?”.Lo que ocurrió después no necesita recordatorio. Cabría quizá destacar, que aunque la persecusión sistemática de los judíos se inició desde que se crearon los primeros guetos en Polonia, y a todos se les sometió a control conforme las tropas alemanas avanzaban sobre Europa, no fue sino hasta 1941 cuando se decretó la “solución final”, que la aniquilación se tornó masiva y funcionaron los campos de exterminio.Los nazis pretendieron mantener esto en secreto, pero los rumores y algunos testimonios directos muy pronto empezaron a filtrarse. En 1942, The New York Times reportaba ya que por lo menos un millón de judíos había sido ejecutado. Ese mismo año, el Congreso Mundial Judío recibió información confidencial del plan de exterminio nazi y la transmitió a Washington y Londres. Ambos países se abocaron al problema de los refugiados procedentes de los países ocupados, pero no hicieron nada para frenar la matanza. La posición de Estados Unidos y sus aliados era que la mejor manera de detener las atrocidades nazis, era derrotar militarmente a Alemania lo más pronto posible. El Vaticano también estuvo al tanto de lo que sucedía, pero el Papa Pío XII optó todo el tiempo por guardar silencio. Y hasta la Cruz Roja fue manipulada. Así, la mayor parte de la resistencia fue llevada a cabo por los propios judíos o heróicos personajes aislados que desafiaron a los nazis.No fue sino hasta que las tropas soviéticas y los Aliados fueron avanzando sobre Alemania (1944), que el exterminio cesó gradualmente sobre el terreno. Al término, se calculó que 6 millones de judíos, gitanos, minusválidos, prisioneros de guerra y otros grupos minoritarios habían sido sacrificados en los campos de concentración, sin contar los que murieron en otras circunstancias.Los Juicios de Nuremberg imputaron a 22 altos mandos nazis de crímenes de guerra y contra la humanidad (Hitler murió en su búnker), pero muchos otros lograron evadirse y, hasta hoy, se desconoce su paradero.AtrocidadesDurante la Segunda Guerra Mundial, otro episodio en Asia fue calificado a posteriori como genocidio. En diciembre de 1937 el Ejército Imperial japonés tomó la ciudad china de Nanking, y mató a 300 mil de los 600 mil civiles y militares que había ahí, en una carnicería ininterrumpida que duró seis semanas.Los japoneses masacraron primero a los 90 mil soldados chinos que se habían rendido, humillándolos y torturándolos. Después, procedieron a la violación y el asesinato masivo de mujeres, reservándose a las más jóvenes y bonitas como esclavas sexuales. Y, finalmente, la matanza se extendió a toda la ciudad. Los reportes de prensa que aparecieron en Japón, celebraron el triunfo de sus tropas y exhibieron sin pudor imágenes de las atrocidades. En Estados Unidos, el New York Times, TIME y el Reader’s Digest también publicaron notas, pero la opinión pública las recibió con escepticismo, mientras que el gobierno, preocupado por el avance del nacionalsocialismo en Europa, no hizo gran cosa. Al término de la guerra se instituyó un Tribunal Penal Internacional para el Lejano Oriente, que abordó el caso, pero de manera insuficiente. También fue muy criticado por su unilateralismo, ya que sólo juzgó a los países del Eje y dejó fuera los bombardeos atómicos sobre Hiroshima y Nagasaki, que entraban en la categoría de crímenes de lesa humanidad. El “rapto de Nanking” sigue ensombreciendo las relaciones entre China y Japón, pese a que Tokio en los últimos años ha intentado algunas disculpas.Aunque no está considerado como genocidio, porque no fue dirigido contra un grupo en particular, al igual que la Unión Soviética con Stalin, China tuvo su propia cuota masiva de víctimas con Mao. A fines de los años 50, las delirantes políticas de agrarización e industrialización del llamado “Gran Salto Adelante” provocaron una hambruna que, según las fuentes, pudo haber causado entre 14 millones y 40 millones de muertos. Las purgas de la “Revolución Cultural”, habrían provocado otro medio millón más de muertos. Veinte años después (1975-1978), en Camboya, otro intento similar por parte del líder del Khmer Rojo, Pol Pot, derivó en la muerte de por lo menos el 25 por ciento de la población, aunque otras cifras suben hasta un tercio.Luego de renombrar al país como República Democrática de Kampuchea, Pol Pot llevó a cabo una “purificación” del capitalismo: eliminó todas las influencias externas, expulsó a los extranjeros, cerró las embajadas y rechazó la ayuda exterior. Periódicos, radio y televisión callaron; el correo y el teléfono fueron intervenidos; la propiedad privada y los servicios públicos eliminados; el dinero y la religión abolidos, y la patria potestad sobre los hijos revocada.Cerrado al mundo, el régimen comunista procedió a la evacuación forzada de los habitantes de las ciudades al campo. Muchos murieron en los traslados y otros de hambre, agotamiento, enfermedades y maltratos en los campos de cultivo donde se les concentró como trabajadores esclavos. Además, en todo el país se realizaron purgas contra quien mostrara el más mínimo disenso o, simplemente, perteneciera a la “vieja sociedad”. También fueron atacadas las minorías china, vietnamita y musulmana.La cifra total de muertos, encontrados en impresionantes fosas masivas, osciló entre 2 y 3 millones. Pese a la filtración de información, la comunidad internacional no intervino para nada. Sólo hasta que en 1978 Vietnam invadió Camboya para defenderse de los constantes ataques fronterizos y expulsar al Khmer Rojo del poder, cesó el genocidio. 20 años después, Pol Pot murió de un ataque al corazón, luego de ser arrestado para llevarlo ante un tribunal internacional.Más recientemente, en Ruanda, se dio una de las matanzas interétnicas más vertiginosas y masivas de que se tenga registro. A partir del 6 de abril de 1994 y en los siguientes 100 días, 800 mil tutsis y hutus moderados fueron asesinados por extremistas hutus, a un promedio de 10 mil personas diarias.En 1990 se había firmado un acuerdo para que la mayoría hutu y la dominante minoría tutsi, compartieran el poder en Ruanda, pero tres años después las tensiones étnicas volvieron a escalar con el asesinato del primer presidente hutu en la vecina Burundi. La violencia estalló cuando el avión en que viajaban el presidente ruandés, Juvenal Habyarimana, y el nuevo de Burundi, Cyprien Ntaryamira, ambos hutus, fue derribado por el Frente Patriótico Ruandés, controlado por los tutsis.En venganza, extremistas atacaron a hutus moderados y líderes tutsis. Luego, las matanzas se extendieron por todo el país, utilizando como armas toda clase de instrumentos, como machetes, hachas, azadones, palos o lo que hubiera a la mano. Muchas víctimas fueron cercadas y quemadas vivas, y los asesinos no respetaron como refugio ni iglesias ni hospitales, donde se cometieron algunas de las peores masacres.La pequeña fuerza de paz de la ONU rápidamente fue rebasada e, inclusive, algunos de sus miembros capturados y asesinados. Entonces, Estados Unidos, Francia, Bélgica e Italia empezaron a evacuar a su personal, pero no hicieron nada por proteger a los locales, que quedaron abandonados a su suerte.En Naciones Unidas, las matanzas fueron calificadas como una ruptura del cese el fuego entre hutus y tutsis. Tanto el organismo como Estados Unidos evitaron cuidadosamente hablar de genocidio, lo que hubiera requerido de una intervención militar de urgencia. Por el contrario, al agravarse la crisis, el Consejo de Seguridad votó unánimemente por el retiro de las fuerzas de paz, dejando atrás a apenas 200 elementos. Con la vía libre, las milicias hutus procedieron al aniquilamiento sistemático, apoyadas por amplios sectores incitados por el odio étnico. Al mes, los medios ya hablaban de genocidio. Presionada por la opinión pública, la ONU votó entonces por devolver 5 mil soldados a Ruanda, pero como no fijó un calendario, nunca llegaron para detener la carnicería. Ésta terminó cuando rebeldes tutsis de los países vecinos entraron y derrotaron a las milicias hutus. Para entonces, 11 por ciento de una población de 7 millones 200 mil habitantes había sido aniquilada. A fines del mismo 1994 se creó un Tribunal Penal Internacional ad hoc, que constituyó un hito al emitir la primera condena mundial por genocidio y reconocer la violencia sexual como parte de éste. En 1998, cuando viajó a Africa, el presidente estadunidense Bill Clinton pidió tardías disculpas por la inacción internacional.Actualmente hay un escenario similar en la provincia sudanesa de Darfur. En ese país que vive una guerra civil intermitente entre el norte musulmán y el sur cristiano y animista, desde 2003 se desarrolla un nuevo conflicto entre grupos rebeldes y el gobierno central, en medio del cual ha quedado atrapada la población civil. El modus operandi es el mismo: asesinatos masivos, desapariciones forzadas, destrucción de poblados, saqueos, violaciones sexuales y desplazamientos forzosos. Las cifras al día de hoy ascienden a 150 mil muertos y 2 millones 500 mil desplazados internos, más otro medio millón en el vecino Chad. Ante las denuncias de la prensa y organismos humanitarios, en 2005 el Consejo de Seguridad de la ONU formó una comisión para estudiar los hechos en Darfur. Rigurosa, ésta concluyó que no se tipificaba el genocidio, porque la violencia no estaba dirigida contra un grupo específico; pero sí crímenes de lesa humanidad, que deberían ser juzgados por la Corte Penal Internacional.En fechas recientes, el fiscal general de la CPI, Luis Moreno Ocampo, acusó al presidente sudanés Omar al Bashir de genocidio y crímenes de guerra. Su delito: respaldar a las milicias janjaweed, las principales acusadas de cometer violaciones contra los derechos humanos. El mandatario señala a los rebeldes como responsables.Paradójicamente, la Unión Africana, la Unión Europea, Estados Unidos y la propia ONU, todos consideraron esta acusación como una amenaza al proceso de paz en Sudán. Inclusive, la misión conjunta estacionada en Darfur, anunció la evacucación de su personal no esencial, ante posibles represalias de fuerzas que apoyan al presidente, aunque dijo que mantendría a sus soldados.Así, mientras la comunidad internacional se debate otra vez entre tecnicismos y consideraciones políticas, como en Armenia, Ucrania, Nanking, Alemania, Camboya, Ruanda y la exYugoslavia, en el terreno la población civil de Darfur sigue sufriendo y muriendo.

Resultados de boxeo olímpico

Pekín, 11 Ago (Xinhua-Notimex).- Resultados de las competiciones de boxeo de los Juegos Olímpicos de Beijing celebradas hoy lunes: Peso pluma 1/16 final Li Yang, China, vence a Robson Conceicao, Brazil, 12-4 Luis Porozo, Ecuador, a Roberto Navarro, República Dominicana, +3-3 Bahodirjon Sultonov, Uzbekistán, a Anthresh Lalit Lakra, India, 9-5 Vasyl Lomachenko, Ucrania, a Albert Selimov, Rusia, 14-7 Raynell Williams, Estados Unidos, a Alessio di Savino, Italia, 9-1 Khedafi Djelkhir, Francia, a Paul Fleming, Australia, 13-9 Peso superpluma 1/16 final Asylbek Talasbaev, Kirguizistán, a Everton Lopes, Brazil, 9-7 Anthony Little, Australia, a Julius Munyelele Indongo, Namibia, 14-2 Alexey Tishchenko, Rusia, a Saifeddine Nejmaoui, Túnez, 10-2 Domenico Valentino, Italia, a Tahar Tamsamani, Marruecos, 15-4 Yordenis Ugas, Cuba, a Hamza Kramou, Algelia, 21-3.

Georgia controla una de las puertas del petróleo de Europa

Los bombardeos rusos en Georgia y los combates en la República separatista de Osetia del Sur encierran un serio peligro para Europa: que se dañe o destruya el estratégico oleoducto Bakú-Tbilisi-Ceyhan (BTC), que se extiende desde las riberas del Caspio en Azerbaiyán hasta la costa meridional de Turquía en el Mediterráneo. Es la única tubería que lleva al continente europeo el crudo del Caspio sin pasar por Rusia, que hasta su construcción ostentaba el monopolio de los suministros de hidrocarburos procedentes de Asia Central.
Medvédev asegura que la operación militar en Osetia del Sur está casi concluida


El BTC es el segundo oleoducto más largo del mundo, calificado por Turquía como la Ruta de la Seda del siglo XXI. En sus 1.768 kilómetros de recorrido, el BTC pasa por algunas zonas conflictivas del Cáucaso, como Georgia (con 249 kilómetros que se empezaron a construir en 1999).
De ser destruido, el monopolio de los suministros de petróleo volvería a la ruta rusa, a través de Bielorrusia y Ucrania. Puesto en funcionamiento en 2006, el BTC permite a Europa obtener diariamente 1,2 millones de barriles de crudo.
El BTC ha costado unos 3.600 millones de dólares (unos 2.370 millones de euros), que aportaron varias petroleras internacionales, entre las que destacan British Petroleum y las norteamericanas Chevron y Conoco-Philips.
El tendido del tramo georgiano del oleoducto estuvo a cargo de la empresa mixta franco-estadounidense Amec-Spie-Petrofac. Los ingresos para Georgia por el tránsito del crudo se calculan en 62 millones de dólares anuales.
La fragilidad de Georgia como país de tránsito alternativo de hidrocarburos ha quedado al descubierto estos días, en los que han resucitado los conflictos latentes de Osetia del Sur y Abjazia. El sábado, Azerbaiyán anunció que suspendía las exportaciones petroleras a través de los puertos georgianos de Kulevi y Batumi, en el mar Negro, debido a los bombardeos rusos.
El primer ministro georgiano, Lado Gurguenidze, aseguró que la aviación rusa había lanzado bombas en las cercanías del oleoducto BTC, aunque éste no ha resultado dañado y ni siquiera está claro que dichos bombardeos hayan ocurrido en la realidad. British Petroleum, la firma operadora del BTC, ha puesto en duda las afirmaciones de Gurguenidze.
Por territorio de Georgia también pasan el oleoducto Bakú-Suspsa, unas tuberías soviéticas renovadas, así como el gasoducto Bakú-Tbilisi-Erzurum (con capacidad de 8.000 millones de metros cúbicos de gas al año).
La mayoría de los analistas coincide en que las tuberías georgianas no corren peligro, de momento. También están de acuerdo en que los actuales combates en Georgia son un factor negativo a largo plazo para las inversiones en los hidrocarburos del mar Caspio debido a la inestabilidad de la región caucásica.

Amenaza con extenderse a Abjazia la guerra entre los rusos y Georgia

Mos­cú (AP, EFE, AN­SA y Té­lam) - Mien­tras Geor­gia ‘‘su­pli­ca’’ un al­to el fue­go y el ini­cio in­me­dia­to de ne­go­cia­cio­nes, Ru­sia le res­pon­dió que an­tes de­be re­ti­rar ‘‘sin con­di­cio­nes’’ sus tro­pas de Ose­tia del Sur y com­pro­me­ter­se ‘‘por es­cri­to’’ a no vol­ver a ata­car­la, en un con­flic­to que ame­na­za con ex­ten­der­se en la re­gión: l Los se­pa­ra­tis­tas de Ab­ja­zia de­cla­ra­ron el es­ta­do de gue­rra por 10 días y lan­za­ron una ofen­si­va pa­ra apo­de­rar­se del es­tra­té­gi­co des­fi­la­de­ro de Ko­do­ri y del dis­tri­to li­mí­tro­fe de Zug­di­di, am­bos ocu­pa­dos por geor­gia­nos.l Ucra­nia le ad­vir­tió al Krem­lin que si usa su flo­ta del Mar Ne­gro en la con­tien­da -ya des­ple­gó va­rios bu­ques en la zo­na pa­ra im­pe­dir el in­gre­so de em­bar­ques con ar­mas y di­jo ha­ber hun­di­do un guar­da­cos­tas de Ti­flis- ‘‘ten­drán pro­hi­bi­do el re­gre­so’’ al puer­to de Se­vas­tó­pol, que Kiev le al­qui­la a Mos­cú.‘‘Es­tas de­cla­ra­cio­nes no fa­vo­re­cen las re­la­cio­nes bi­la­te­ra­les’’, re­pli­có la can­ci­lle­ría ru­sa.COM­BA­TESPor se­gun­do día con­se­cu­ti­vo, los re­bel­des ab­ja­sos, que afir­man di­cen con­tar con ayu­da del Krem­lin, cas­ti­ga­ron con ar­ti­lle­ría, co­he­tes y fue­go de avia­ción las po­si­cio­nes de sus ad­ver­sa­rios en Ko­do­ri, un es­tre­cho pa­so que ja­más lo­gra­ron con­quis­tar a lo lar­go de la gue­rra de se­ce­sión.‘‘Aho­ra es el mo­men­to de to­mar el úl­ti­mo te­rri­to­rio de Ab­ja­sia que si­gue fiel al ré­gi­men de Ti­flis’’, des­ta­có el mi­nis­tro de De­fen­sa in­sur­gen­te, Me­rab Kish­ma­ria.En el mar­co de ese plan, los in­de­pen­den­tis­tas vio­la­ron los acuer­dos tri­par­ti­tos que es­ta­ble­cen una fran­ja de se­gu­ri­dad y se atrin­che­ra­ron a lo lar­go del río In­gu­ri. ‘No nos de­ten­dre­mos an­te la fron­te­ra de Geor­gia e im­pon­dre­mos or­den en Zug­di­di’’, de­sa­fió el fun­cio­na­rio.Fuen­tes oc­ci­den­ta­les re­ve­la­ron que ca­zas de Mos­cú des­tru­ye­ron ayer una fá­bri­ca si­tua­da en las afue­ras de Ti­flis de­di­ca­da a la fa­bri­ca­ción de avio­nes de com­ba­te Su-25. BA­TA­LLA ME­DIA­TI­CAEl pre­si­den­te de Geor­gia, Mi­jail Saa­kash­vi­li, uti­li­zó los mi­cró­fo­nos de la pren­sa in­ter­na­cio­nal pa­ra dis­pa­rar una se­rie de de­nun­cias: ‘‘Ru­sia quie­re in­va­dir­nos por­que ne­ce­si­ta con­tro­lar las ru­tas ener­gé­ti­cas de Asia Cen­tral y del mar Cas­pio. To­das las res­pon­sa­bi­li­da­des del con­flic­to son de ellos, que hi­cie­ron acá lo mis­mo que rea­li­za­ron en el ’56 en Bu­da­pest y en el 68 en Pra­ga’’.‘‘Es­ta­mos fren­te a la vio­la­ción de los más ele­men­ta­les va­lo­res éti­cos, pues se tra­ta de una agre­sión gra­tui­ta y bru­tal por tie­rra, ai­re y mar -pro­tes­tó-. Han gol­pea­do ob­je­ti­vos cien por cien­to ci­vi­les al bom­bar­dear 15 ciu­da­des e in­clu­so el ae­ro­puer­to in­ter­na­cionl de Ti­flis’’.Tam­bién ga­ran­ti­zó que ‘‘to­das nues­tras tro­pas fue­ron re­ple­ga­das’’ y anun­ció la crea­ción de ‘‘un co­rre­dor hu­ma­ni­ta­rio’’ pa­ra eva­cuar a la po­bla­ción y a los he­ri­dos.‘‘Por aho­ra no veo ne­ce­sa­ria una in­ter­ven­ción mi­li­tar de Es­ta­dos Uni­dos’’, se­ña­ló con­sul­ta­do so­bre la co­la­bo­ra­ción que es­pe­ra de su fé­rreo so­cio en Oc­ci­den­te.Des­de la otra ve­re­da, su par Dmi­tri Med­ve­dev or­de­nó a la fis­ca­lía de la na­ción abrir una in­ves­ti­ga­ción so­bre lo que con­si­de­ró un ‘‘ge­no­ci­dio’’ per­pe­tra­do por el ejér­ci­to geor­gia­no con­tra la po­bla­ción de Ose­tia del Sur, el 90 por cien­to con ciu­da­da­nía ru­sa.‘‘Los cul­pa­bles de es­tos ac­tos ca­tas­tró­fi­cos, que han cau­sa­do más de 2.000 muer­tos y 30.000 re­fu­gia­dos, se­rán per­se­gui­dos y cas­ti­ga­dos’’, su­bra­yó el man­da­ta­rio.El Krem­lin pu­so en du­da la re­ti­ra­da geor­gia­na y pre­ci­só que to­da­vía ha­bía uni­for­ma­dos de ese país en cier­tos ba­rrios ale­da­ños a la de­vas­ta­da ca­pi­tal Ts­jin­va­li.

Ucrania amenaza con impedir regreso a buques de guerra rusos que vigilan Georgia


Kiev, 10 de agosto, RIA Novosti. El ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania declaró hoy que su país se reserva el derecho de impedir la entrada a su territorio a los buques de guerra rusos movilizados para vigilan las costas de Georgia.
"Para impedir ser involucrada en conflictos armados y acciones de guerra, y de acuerdo a las normas internacionales y su legislación, Ucrania se reserva el derecho de impedir el regreso a buques de la Flota del mar Negro de Rusia a sus bases temporales localizadas en el territorio ucraniano", subrayó un comunicado de la cancillería ucraniana.
El comunicado de la cancillería se refirió al crucero portamisiles "Moskvá", la patrulla "Smetlivi", embarcaciones para el desembarco de tropas y otros navíos auxiliares que desde hoy ocupan posiciones en la parte oriental del mar Negro cerca a las costas de Georgia", según comunicó horas antes un portavoz de la Armada de Rusia.
Según el portavoz, las embarcaciones están destinadas a cumplir misiones operativas o humanitarias en Osetia del Sur, donde tiene lugar una catástrofe humanitaria a raíz de la agresión emprendida el pasado viernes por el ejército georgiano contra la población suroseta y fuerzas rusas de paz.
Por su parte, el presidente de la autoproclamada república de Abjasia Serguei Bagapsh justificó la presencia de barcos de guerra rusos cerca a las costas de Georgia porque obligaron la retirada de cuatro buques militares georgianos que la víspera, dispararon contra el territorio de Abjasia a siete millas de su costa.
"La Flota rusa del mar Negro permanecerá en Crimea (Ucrania) según los tratados vigentes hasta 2017 a pesar de las declaraciones "cínicas", de la cancillería de Ucrania", comentó al respecto, el viceministro de asuntos Exteriores de Rusia Grigori Karasin en conferencia de prensa en Moscú.

Un verano que Anastasiya nunca olvidará


Tímida, obediente, simpática y “siempre con una sonrisa en la boca”, así es como definen Alejandro García, Nieves Espinosa y sus hijos, Jesús Manuel, de trece años, y Ana María, de once, a Anastasiya Pvlovska, una niña procedente de Kiev (Ucrania) a la que han acogido en su hogar, en Almagro, durante este verano y sin duda alguna, acogerán en los venideros. Anastasiya lleva algo más de tres semanas en nuestro país, algo que se ha podido llevar a cabo gracias a la labor que realiza año tras año la Asociación Crean. Este es el primer año que Anastasiya viene a España y no se maneja bien con nuestro idioma, pero ese no es ningún problema para que esta niña muestre su agradecimiento y cariño a esta familia, su familia también a partir de ahora y cuyos miembros se sienten muy orgullosos de ella, “es una maravilla de cría” nos confiesa Alejandro.
Anastasiya cumplirá el próximo día catorce once años rodeada de su familia de acogida y de otros niños ucranianos que pasan el verano en Almagro, en una fiesta que organizarán en Polideportivo 75, una sociedad privada en donde Anastasiya disfruta gratis, junto con Alejandro, Nieves y el resto de la familia, socios del polideportivo, de la piscina, algo que le encantan, “es terminar de comer y querer irse a la piscina”, declara Nieves.
Nada más llegar a nuestro país, Anastasiya pudo disfrutar de unas vacaciones en La Coruña y del mar, allí “no paró, es una niña muy saltarina y no salía del agua, con lo fría que esta allí” nos confesó Alejandro. Pero también Anastasiya y el resto de la familia han visitado la Warner Bross, una experiencia que será inolvidable para Anastasiya, donde pudo ver en primera persona a sus personajes de dibujos animados preferidos.
En su día a día en Almagro,esta niña es feliz, recibe el calor de una familia que la trata como si de un miembro más se tratará, de hecho es un miembro más, una hija más para Alejandro y Nieves y una hermana más para Ana María, con la que comparte habitación y con la que pasa la mayor parte del tiempo y para Jesús Manuel, con ellos comparte ratos de ocio, diversión y también deberes, en los que Anastasiya, ayudada por Alejandro, aprende español. “Es una hija más, la trato como a mis hijos”, declara Nieves.
Tal y como explican Alejandro y Nieves, el acoger a uno de estos niños requiere un compromiso que familias como esta están dispuestas a asumir “no nos sobra el dinero, todo lo contrario, pero si esta niña con cien euros va a ser mucho más feliz que nosotros con quinientos, eso lo dice todo, además donde comemos cuatro comemos cinco y sin ningún problema, la niña es feliz”, confesó Alejandro. Durante el tiempo que Anastasiya lleva aquí ha engordado siete kilos, además los dolores de cabeza le han disminuido hasta ser nulos y no recurrir a su medicación, Alejandro nos explica que en los cuarenta días que pasa aquí gana alrededor de cuatro años de vida, ¿que razón más habría que buscar para acoger a uno de estos niños que viven en un ambiente tan contaminado por la radiación?, con tan sólo dedicarles un poco de nuestro tiempo en el verano les estamos regalando vida. Y es que la vida en Ucrania no es fácil, en el caso de Anastasiya, tiene siete hermanos, su madre no trabaja, su padre es albañil y gana alrededor de noventa euros al mes, nos confiesa Alejandro.
Se trata de niños que necesitan la ayuda que familias como esta no dudan en darles, Alejandro y Nieves seguirán en contacto con Anastasiya, se han marcado como objetivo pagarle los gasto que supone un dentista para que en un futuro próximo disfrute de una bonita sonrisa, no descartan ir a Ucrania, de vacaciones y conocer más de cerca la vida y la familia de esta niña a la que quieren con locura, son todo un ejemplo a seguir.

La caída del consumo frena la demanda de aceite de oliva

La demanda de aceite de oliva en el mercado interior ha experimentado esta campaña una caída del 4,9% respecto al mismo periodo en el año anterior, según los datos manejados por la Agencia para el Aceite de Oliva, encuadrada en el Ministerio de Medio Ambiente. El descenso en el consumo se eleva al 6,7% en relación con la media de las últimas cuatro campañas.

Las marcas blancas mantienen el crecimiento frente a las más caras
La disminución de las ventas en el mercado interior se asocia a los problemas en el conjunto de la economía, que afectan a muchos bienes de gran consumo. La debilidad de la demanda se produce en el momento de mayor moderación de precios de los últimos tiempos. El aceite de oliva cuesta hoy casi un 4% menos que hace un año, según datos del Ministerio de Industria, con una media de 3,32 euros por litro en el comercio.
La caída de demanda de aceite de oliva no ha supuesto elevar la de aceite de girasol, cuyos precios se han disparado en los últimos meses por el bloqueo en las importaciones desde Ucrania y Argentina. La atonía del consumo es especialmente importante en las marcas propias, mientras se mantiene un crecimiento de las marcas más baratas de la distribución.
Frente a este comportamiento de las ventas en el mercado interior, las exportaciones han experimentado en el mismo periodo un incremento del 5,1% sobre el año pasado y el 11,7% en relación con la media de las cuatro últimas campañas. Esta evolución positiva de las exportaciones es consecuencia de la bajada de los precios del producto en origen, que, en la actualidad, se sitúa ya en unos 2,25 euros por kilo.
La actual campaña de aceite de oliva comenzó el pasado 1 de noviembre con unas reservas en manos de la producción y de los industriales de 223.000 toneladas. A esa cifra se ha sumado una cosecha de 1.230.000 toneladas y unas importaciones que se estima pueden llegar a las 80.000 toneladas.
Pese al aumento de las exportaciones, el sector teme que, para final de campaña, la materia almacenada se pueda elevar a unas 300.000 toneladas, lo que abarataría más los precios.

domingo, 10 de agosto de 2008

La última hora: Georgia se repliega, pero sigue la guerra

Acuerdan Georgia y Rusia corredor humanitarioMoscú, 10 Ago (Notimex).- Rusia y Georgia acordaron hoy establecer un corredor humanitario para permitir la salida de civiles de Tskhinvali, capital de Osetia del Sur, muchos de los cuales han huido hacia otras partes de territorio georgiano y Osetia del Norte.“Esperamos que el lado georgiano cumpla el acuerdo alcanzado”,informó el viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Gregorio Karasin, citado por la agencia de noticias Civil Georgia en su página.Esta mañana, Georgia demandó un alto el fuego y un pasillo humanitario en Tskhinvali, donde los bombardeos han destruido la ciudad, según autoridades georgianas.La agencia rusa de noticias Novosti, por su parte, precisó que Rusia y Georgia acordaron abrir dos corredores humanitarios para evacuar a los refugiados, los heridos y los periodistas rusos de Osetia del Sur.En tanto, Ucrania advirtió este domingo a Rusia que en caso de utilizar la Flota rusa del Mar Negro contra Georgia sus buques tendrán prohibido regresar a la base principal, Sebastópol, que Rusia alquila a Ucrania.“Ucrania se reservará el derecho de prohibir el regreso a su territorio de los buques que participen en el conflicto”, informó en un comunicado el Ministerio ucraniano de Asuntos Exteriores.Explicó que la medida se adoptará “de acuerdo al derecho y a las normas internacionales” con el fin de evitar que “Ucrania pueda verse arrastrada a un conflicto militar” por culpa de la flota rusa del Mar Negro con base en territorio ucraniano.Rusia ha acusado a Ucrania de “armar hasta los dientes” a Georgia, cuyas tropas han comenzado este domingo a retirarse de Tskhinvali y las fuerzas rusas controlan la mayor parte de la capital suroseta, confirmó el jefe del Estado Mayor ruso, Anatoly Nagovitsyn.La advertencia de Ucrania fue lanzada después que la agencia Interfax precisó que navíos de guerra rusos impusieron un bloqueo naval sobre Georgia para impedir la entrada de armas y de otros suministros militares a esa república caucásica.En tanto, la retirada de las tropas georgianas tuvo lugar en momentos en que Rusia había intensificado la ofensiva, pues anoche el ejército ruso bombardeó un aeropuerto militar de Tbilisi, capital de Georgia, sin causar víctimas, sólo daños materiales.La Unión Europea (UE), la Organización para la Seguridad y Cooperación Europea (OSCE) y Estados Unidos han enviado una delegación a Georgia para intentar mediar un alto el fuego, indicó el ministro británico de Defensa, Des Browne.La situación en Osetia del Sur se deterioró el jueves pasado, cuando Georgia indicó haber lanzado una operación militar en la región después que su cese al fuego unilateral fue respondido por fuego de artillería de los separatistas, dejando 10 muertos.De inmediato, tanques rusos comenzaron a ingresar a territorio de Georgia, que procura establecer su autoridad en la región de Osetia del Sur, que limita al norte con Osetia del Norte, república integrada en la Federación de Rusia.

Las tropas rusas toman el control de Osetia del sur

Confusión y noticias contradictorias. Las tropas rusas han tomado el control de Tsjinvali, capital de la separatista Osetia del sur, según la agencia oficial rusa que cita al ministro del Interior georgiano. Horas antes, Georgia había anunciado su retirada de Tbilisi, ciudad suroseta. "Nuestras fuerzas se han replegado completamente", ha afirmado Shota Utiashvili.
El anuncio de la retirada llega tres días después de combates entre Rusia y Georgia tras el tentativo de estos últimos de hacerse con la ciudad pro rusa de Tbilisi.
Este intento provocó una escalada militar rusa con masivos bombardeos que afectaron a la población civil. Mientras tanto, este domingo, el mando ruso anunciaba la decisión de imponer el bloqueo de los puertos marítimos de Georgia. El objetivo, según fuentes de la armada es impedir "que Georgia reciba refuerzos de armamentos".
Georgia, sin embargo, ve otras razones para el bloqueo y recuerdan que uno de los primeros blancos que la aviación rusa ya bombardeó varias veces es el puerto de Poti, desde donde parte hacia Occidente el petróleo del Caspio que Rusia quisiera trasegar exclusivamente por su territorio.
"La exportación de crudo azerbaiyano desde los puertos georgianos ha quedado suspendida provisionalmente a causa de las operaciones militares", dijo a la televisión azerbaiyana Rovnag Abdulaev, presidente de la Compañía Petrolera Estatal de Azerbaiyán.
La aviación rusa también atacó, aunque sin resultados, el oleoducto que cruza Georgia desde Azerbaiyán con destino a Turquía.
Ucrania advierte a Rusia
Ucrania, por su parte, ha advertido a Rusia de que en caso de empleo de la Flota rusa del Mar Negro contra Georgia sus buques tendrán prohibido el regreso a la base principal, Sevastópol, que Rusia alquila a Ucrania.
Así lo declara el Ministerio de Asuntos Exteriores donde informa que Ucrania "se reserva el derecho de "prohibir el regreso a territorio de Ucrania hasta que se arregle el conflicto de los buques que puedan participar en el conflicto".ZA

Ucrania amenaza a Rusia ante una posible intervención en el Mar Negro


Ucrania ha advertido a Rusia de que en caso de empleo de la Flota rusa del Mar Negro contra Georgia sus buques tendrán prohibido el regreso a la base principal, Sevastópol, que Rusia alquila a Ucrania.
Una declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores advierte de que Ucrania "se reserva el derecho de "prohibir el regreso a territorio de Ucrania hasta que se arregle el conflicto de los buques que puedan participar en el conflicto".

Georgia: Ucrania amenaza con prohibir regreso de navíos rusos

Ucrania amenazó el domingo con prohibir la vuelta al puerto de Sebastopol, en el sur de Crimea, a los navíos de la Flota rusa del mar Negro desplegados contra Georgia, según un comunicado del ministerio ucraniano de Relaciones Exteriores.
"La parte ucraniana reconoce el derecho, conforme a las normas del derecho internacional y de la legislación ucraniana, de prohibir el regreso a territorio de Ucrania hasta el final del conflicto (ruso-georgiano) de navíos que puedan tomar parte" en las operaciones militares, según el texto difundido en el sitio internet del ministerio.
Navíos de guerra rusos impusieron en el mar Negro un bloqueo naval sobre Georgia para impedir la entrada de armas y de otros medios militares a ese país, informó el domingo la agencia Interfax.

Georgia anuncia la retirada de sus tropas de Osetia del Sur

Tbilisi asegura que sus tropas "se han retirado por completo" de Osetia del Sur, aunque fuentes militares rusas han desmentido estos movimientos
Georgia ha retirado sus fuerzas de la región separatista de Osetia del Sur, donde mantenían un enfrentamiento contra las tropas rusas desde hacía tres días por el control de la capital, Tsjinvali. Según ha anunciado a diversos medios el portavoz del ministerio del Interior georgiano, Shota Utiashvili, sus fuerzas militares "se han retirado por completo".
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El polvorín de Osetia del Sur
FOTOS - REUTERS - 09-08-2008
Tragedia. La aviación rusa ha respondido a la ofensiva de Tbilisi bombardeando la ciudad de Gori, cerca de Osetia del Sur. Una mujer llora después del bombardeo.- REUTERS
El polvorín de Osetia del Sur - Tragedia
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Rusia no ha reaccionado oficialmente al anuncio de Tbilisi, que ha causado una cierta confusión. Fuentes militares rusas han asegurado a la agencia Interfax que Georgia no ha movido a sus de Osetia del Sur. La retirada de las tropas georgianas sería provisional y se adscribe exclusivamente a la capital osetia, no al resto del territorio, según France Presse.
El anuncio de repliegue militar por parte de Georgia ha coincidido con una intensificación, en las últimas horas, de la ofensiva lanzada por Rusia. En la pasada madrugada, el Ejército ruso ha bombardeado un aeropuerto militar de Tiblisi, capital de Georgia, según han asegurado fuentes del Gobierno georgiano. El ataque no ha causado víctimas, pero sí daños materiales.
La aviación rusa también ha bombardeado en la últimas horas el distrito georgiano de Zugdidi, en el oeste de Georgia, según ha informado la emisora Imedi. Por el momento, no hay un balance oficial de víctimas en esa zona, colindante con la región separatista de Abjazia, cuyas tropas han entrado en la franja de seguridad, controlada por los cascos azules rusos y se concentran en la frontera con Georgia. Y es que las fuerzas abjazas y rusas no han detenido sus ataques en el desfiladero de Kodori, zona en el norte de Abjazia que se mantuvo leal a Georgia.
Fracaso de la diplomacia
Mientras tanto, la vía diplomática para buscar una salida al conflicto ha fracasado hasta el momento. Ayer, el Consejo de Seguridad de la ONU renunció, en la tercera reunión que celebraba en menos de 48 horas, a la posibilidad de emitir un llamamiento conjunto al alto el fuego en la zona de conflicto por falta de consenso.
La Unión Europea (UE), la OSCE y EE UU han enviado una delegación a Georgia para intentar mediar en un alto el fuego, según informó el ministro británico de Defensa, Des Browne, en declaraciones a Sky News. Previamente se había informado de que funcionarios de la OTAN viajarían en esta delegación, extremo desmentido por la organización. Francia, que ostenta este semestre la presidencia de la UE, anunció ayer por la tarde el envío "cuanto antes" de su ministro de Exteriores, Bernard Kouchner. En un comunicado emitido por el Elíseo, Francia pidió al fin de las hostilidades y a la vuelta del statu quo anterior.
El presidente georgiano, Mijail Saakashvili, quien ha anunciado su desplazamiento hasta una localidad fronteriza con Osetia del Sur, tenía previsto hablar hoy con su homólogo estadounidense, George W. Bush, del que espera sacar un compromiso formal en el conflicto con Rusia, así como ayuda para facilitar la vuelta de los 2.000 soldados que su país tiene en Irak.
El presidente ruso, Dimitri Medvédev, ya mantuvo ayer una conversación telefónica con Bush, al que comunicó en primera persona que la única salida a la crisis actual es la retirada de las fuerzas georgianas de Osetia del Sur.
Medvédev calificó la situación en la región de "catástrofe humanitaria" ante los miles de civiles que están padeciendo la ofensiva georgiana. Según las autoridades rusas, el conflicto ha dejado más de 2.000 muertos, una cifra negada desde Tbilisi, y Moscú ha evacuado a 30.000 civiles de Tsjinvali.

La escalada de tensión por Osetia del Sur
Osetia del Sur, que limita al norte con Osetia del Norte, república integrada en la Federación de Rusia, arrastra un conflicto separatista con Georgia desde la independencia de la república ex soviética en 1991. Sin embargo, fue a partir de 1995 cuando las disputas territoriales brotaron con más fuerza después de que las autoridades georgianas se enfrentasen con los separatistas locales.
El 19 de enero de 1992, la mayoría de los habitantes de Osetia del Sur votó a favor de su incorporación a Rusia, tras lo cual empezaron a recibir ayuda desde el Norte, de donde llegaron combatientes. Las autoridades surosetas convocaron un referéndum de independencia el 12 de noviembre de 2006. El 99% de la población local votó a favor de la independencia, aunque Tbilisi no reconoció la validez de la consulta popular. Casi el 90% de los surosetios tienen ciudadanía rusa.
Como Abjazia, es una región de gran interés para Rusia y Occidente, ya que por allí pasan importantes rutas de transporte energético. Formalmente pertenece a Georgia aunque de hecho es soberana. Los surosetios gozan de una independencia de facto (como los abjazos), pero no controlan su territorio. Los militares georgianos ocupan varias alturas que les permiten bombardear tanto Tsjinvali como otras localidades. Desde la independencia de Kosovo, Rusia ha mostrado su apoyo político y financiero y su relación especial con ambas regiones.
El cruce de acusaciones entre Tbilisi y Moscú ha sido una constante en el largo conflicto que arrastran ambos países. Georgia, amparada por Estados Unidos y la UE, acusa a Rusia de "incentivar el separatismo". El Kremlin, por su parte, culpa a Georgia por la escalada de tensión y por no poner fin a las disputas territoriales. La última crisis entre ambos países llegó con las acusaciones georgianas por el derribo de un avión espía por parte de Moscú.

Los 30 españoles que viven en Georgia, a salvo
La colonia española en Georgia, compuesta de unas 30 personas residentes en su mayoría en la capital, se encuentra "bien" y alejada de la zona en conflicto con Rusia, ubicada en la región separatista de Osetia del Sur, ha informado hoy a Europa Press un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
A los españoles se les ha recomendando que eviten desplazarse a la zona en conflicto, ha señalado la misma fuente, que ha precisado que el cónsul español de España en Moscú, Manuel Redondo se mantiene en permanente contacto con el cónsul honorario de España en Georgia, que depende de la Embajada de España en Moscú, ya que no existe legación española en Georgia.