miércoles, 18 de febrero de 2009

Uruguay venderá carne a Ucrania

Montevideo, Uruguay- El Presidente de INAC, Alfredo Fratti, anunció que Uruguay firmará un acuerdo sanitario con Ucrania para la apertura de ese mercado a las carnes uruguayas.
Las negociaciones comenzaron en 2007 y fueron concluidas durante la Feria PROEXPO, informó Fratti.
Comentó que durante las conversaciones con los representantes ucranianos, se negociaron algunas modificaciones a los formatos de los certificados sanitarios
La visita de Podoleva se realizará en el próximo mes de marzo, quien comentará a las autoridades nacionales sobre las últimas novedades de la tramitación de estos certificados sanitarios, dijo Fratti.
Podoleva es la Vicepresidenta de la Cámara de Comercio Ucraniana

Más miedo al clima que al átomo

Rusia cortó este invierno el suministro de gas y millones de europeos, desde Eslovaquia hasta Bulgaria, tiritaron de frío. El pulso comercial que Moscú echó a Ucrania el pasado mes de enero puso de manifiesto una vez más las carencias del modelo energético de muchos países europeos. La dependencia de regímenes de dudosa fiabilidad, como la propia Rusia o los Estados árabes, empuja a los ciudadanos de la UE a mirar con menos reticencias la antes denostada energía nuclear. Incluso algunos ecologistas se han subido al carro.
El cambio climático perfila una Iberoamérica más pobre e improductiva

Los españoles son aún de los europeos más reacios a las centrales
Los ecologistas denuncian una campaña de lavado de cara del sector
Suecia ha sido el último país en renovar su confianza en los reactores. Un referéndum celebrado hace tres décadas fijó 2010 como el año de cierre de todas las plantas. Pero el Gobierno de centro-derecha decidió a principios de mes mantener sus 10 centrales en funcionamiento y dotarlas de nuevos reactores, en esta ocasión más potentes. Según una encuesta publicada por el periódico Dagens Nyheter, dos tercios de los suecos apoyan esta iniciativa.
Pero no es sólo Suecia. Francia, el campeón nuclear en Europa con cerca de un 80% de electricidad generada a través de la temida energía, construye un reactor de nueva generación. Finlandia, también. Y el Reino Unido invitó el año pasado a varias empresas a levantar nuevos reactores en plantas ya en funcionamiento. El Foro Nuclear, grupo que funciona como lobby de esta industria, contabiliza 44 reactores en construcción en todo el mundo, a los que se sumarán 200 centrales ya planificadas.
La última encuesta de la Comisión Europea sobre la actitud de los ciudadanos hacia la energía, publicada en julio del año pasado, arrojaba un empate técnico entre favorables y contrarios a la nuclear. Por primera vez, los que se declaraban partidarios pisaban los talones a los detractores con una diferencia de tan sólo un punto porcentual. En tres años, las voces afirmativas han pasado del 37% al 44%.
España, por su parte, permanece como reducto antinuclear. Las encuestas -ya sean del Centro de Investigaciones Sociológicas o de instituciones privadas como el BBVA- son tozudas: reflejan una aplastante mayoría de ciudadanos en contra. Con un apoyo de tan sólo el 24%, los españoles se resisten a abandonar la cola de aceptación nuclear entre los europeos.
Pero incluso en España el porcentaje de voces favorables ha aumentado en estos tres años. Un incremento de ocho puntos, ligeramente por encima de la media comunitaria. Y eso que la comparación se hace entre las respuestas dadas en 2005 y el año pasado; es decir, antes de que se desencadenara la crisis del gas. La razón para este viraje no hay que buscarla sólo en los cambios de humor de los dirigentes rusos. Los movimientos ecologistas denuncian que el lobby nuclear ha emprendido una campaña de lavado de imagen que, en muchos aspectos, está cosechando sus frutos.
La preocupación por el cambio climático hace que muchos se inclinen por una energía que, al menos durante su proceso de producción, no emite dióxido de carbono. "Los riesgos nucleares (accidentes, problemas con el almacenamiento de los residuos en el futuro) son sólo hipotéticos. Pero los del cambio climático se perciben como reales, tangibles e inminentes. Por ello, la resistencia hacia la energía nuclear se ha disuelto poco a poco entre todos los segmentos de la población", apunta Paul Isbell, del Real Instituto Elcano.
Pero más allá del viejo y polarizado debate nuclear sí / nuclear no, es patente un nuevo acercamiento, desde puntos de partida más desideologizados y sin prejuicios. "Se ha roto un tabú. Hemos pasado de posiciones dogmáticas simplistas a otras más reflexivas. Parafraseando el eslogan del referéndum de la OTAN, ya no se dice 'de entrada no'; sino 'ya veremos", apunta el sociólogo Víctor Pérez Díaz, autor junto a Juan Carlos Rodríguez del libro Energía y sociedad.
Para gran parte de la generación que alcanzó la mayoría de edad en los años de la transición, oponerse al franquismo suponía rechazar también la energía que el dictador había traído a España. La movilización ciudadana llegó a su punto álgido tras la muerte de Francisco Franco, con manifestaciones que llegaron a reunir a más de 100.000 personas. ETA intervino en la campaña matando a cinco trabajadores. Entre otros, la banda secuestró y asesinó en 1981 a su ingeniero jefe, José María Ryan.
La oposición a la central de Lemóniz marcó a principios de los ochenta un hito en el movimiento del nuclear no, gracias. El recién elegido Gobierno socialista paralizó la puesta en marcha de esta planta vizcaína en 1982, dos años antes de decretar una moratoria para toda España. Sin embargo, Felipe González, el presidente que firmó esa decisión, considera hoy "ineludible" reabrir el debate nuclear en la UE.
"Se ha perdido esa identificación ideológica. Te puedes encontrar con ecologistas defensores de lo nuclear y conservadores que lo atacan, pero no por razones medioambientales, sino porque creen que no es viable desde el punto de vista económico", dice Llorenç Serrano, responsable de Energía de Comisiones Obreras. El anterior líder de este sindicato, José María Fidalgo, ya había escandalizado a no pocos izquierdistas con su defensa de lo radiactivo.
Lo hace con la boca pequeña, pero el Gobierno socialista también ha matizado en los últimos años su postura. En la campaña de 2004, el PSOE prometió cerrar las nucleares en 20 años; y en el debate sobre el estado de la nación de 2005, Zapatero anunció un "calendario de cierre". Las ideas ahora no están tan claras. Aunque el secretario de Medio Ambiente, Hugo Morán, apuntó ayer el próximo cierre de Garoña, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, afirmó hace 10 días que no existe un compromiso. "El programa electoral dice que no va a haber nuevas centrales y que se mantendrá la vida útil de las ocho existentes. Queda por definir cuál es ese horizonte de vida útil", dijo.
Y es que, como señala Llorenç Serrano, el debate en España se reduce ahora a ver qué pasa con las ocho centrales en funcionamiento. El próximo 5 de julio vence el permiso de explotación de Garoña (Burgos). "No tiene sentido hablar de nuevas plantas porque no hay ningún grupo financiero dispuesto a abordar una inversión de tal magnitud. Si hubiera una propuesta concreta podríamos iniciar un debate. Pero lo cierto es que sin ayudas públicas no habrá nuevas centrales económicamente viables", afirma el responsable de CC OO.
Es verdad que la herencia de la lucha antifranquista contribuye a explicar por qué los españoles son de los más reacios de Europa; pero no basta con la historia. Luis Atienza, presidente de Red Eléctrica, apunta en otra dirección: "Aquí percibimos menos los problemas de suministro. Nuestro sistema eléctrico funciona razonablemente bien, porque su funcionamiento no ha sufrido quiebras importantes en los últimos años. Además, la apuesta por las renovables hace que se perciban como una fuente alternativa a la nuclear. Esta confianza es positiva, pero si desaparece la inquietud puede que creamos que las reformas para ampliar nuestro mix energético son innecesarias", alerta.
Este ex ministro socialista apuesta por reducir la intensidad de consumo y ahondar en las renovables, pero también por no renunciar a la nuclear. Y avisa de que el debate sobre un asunto tan estratégico se hace desde una sociedad que parte de unos conocimientos muy rudimentarios de la materia.
"No muchas personas saben que el 20% de la electricidad que consumen es de origen nuclear. Cuando se le pregunta a la gente de dónde viene la energía que le rodea, las respuestas se dividen entre los que creen que viene de la montaña o del mar", bromea.
Aumentan los apoyos en toda Europa, pero la radiografía sociológica de los distintos grupos sociales permanece relativamente invariable, según los Eurobarómetros que Bruselas realiza desde 1998: las mujeres son más antinucleares que los hombres; los de izquierdas más que los de derechas; los jóvenes, que los mayores...
Si se buscara dentro de los confines de la UE el arquetipo del perfecto pronuclear, el resultado sería un hombre lituano o checo, mayor de 55 años, de derechas, con más de 20 años de estudios, un puesto de jefe en su trabajo y que se considera informado sobre residuos radiactivos. En el extremo opuesto, en el de los opositores, abundan las mujeres, con una edad entre 25 y 54 años, que se definen de izquierdas y con un nivel educativo y de información sobre energía menor. Acompañan a España en la lista de países más reacios Irlanda, Portugal, Grecia, Malta y Chipre.
A Carlos Bravo, de Greenpeace, le gusta desmontar las verdades de la campaña que, según él, ha iniciado la industria nuclear para conseguir su objetivo último: convencer a los Gobiernos de la necesidad de subvencionar nuevas centrales. "Se repiten siempre los mismos argumentos. Incluso con los mismos personajes, como Patrick Moore, uno de los fundadores de nuestra organización que se ha reconvertido al otro bando. La industria necesita que esta campaña tenga éxito porque si no consigue en los próximos años una docena de nuevos encargos, tendrá que cerrar".
Bravo enumera los puntos flacos de los argumentos que esgrimen los que alaban las bondades de los reactores: "Dicen que los rusos no son fiables para proveernos de gas, pero el uranio necesario para producir energía nuclear también viene de Rusia; dicen que es la solución al cambio climático, pero no veo ningún banco dispuesto a invertir las enormes cantidades necesarias para poner en marcha nuevas plantas; decían que era la única alternativa porque el petróleo estaba a 150 dólares el barril, pero ahora que ha caído a 45 ya no oigo esos argumentos...".
Una de las principales destinatarias de estos dardos, María Teresa Domínguez, presidenta del Foro de la Industria Nuclear, niega la existencia de campañas. "Los profesionales nucleares somos un desastre como lobby. El creciente apoyo se debe a necesidades reales, no a presiones. No se trata de dejar de lado otras fuentes, sino de que cada país estudie sus circunstancias y el mix que necesita. Suecia se vuelca ahora en esta energía, pero sigue diciendo que su objetivo es llegar a un 40% de renovables", señala. La organización que preside no sólo defiende mantener la continuidad de las centrales en funcionamiento, sino construir nuevas unidades.
El renacimiento de una energía que parecía languidecer está sometido a los vaivenes de una opinión pública, como denuncia el libro de Víctor Pérez Díaz, con un conocimiento muy superficial de la materia. "Las respuestas de los encuestados variarían sensiblemente si se les preguntara en los días siguientes a la crisis del gas ruso o tras la publicación de los problemas de seguridad de la central catalana de Ascó", dicen en Greenpeace.
Accidentes como el de la Isla de las Tres Millas en EE UU en 1979, o la catástrofe de Chernóbil en la antigua URSS en 1986 contribuyeron a configurar una opinión pública muy concienciada contra esta energía. Han pasado 23 años desde que el reactor 4 de la central atómica V. I. Lenin, en territorio de Ucrania, desencadenara una emisión de radiactividad 200 veces mayor que la de las bombas de Hiroshima y Nagasaki con las que concluyó la II Guerra Mundial. Y muchos ya lo han olvidado.

La UE teme que la crisis hunda a Ucrania en la bancarrota

«Ucrania se encuentra en una situación extremadamente grave» afirman altos funcionarios de la diplomacia europea, preocupados por la posibilidad de que el país pueda entrar en una situación devastadora. Después de la crisis del gas con Rusia el pasado enero, los expertos europeos se han dado cuenta de que «Ucrania no puede pagar ni lo que ha acordado con Rusia por el gas, ni ningún precio», porque el país está prácticamente en bancarrota.
El ministro de Finanzas, Viktor Pynzenyk dimitió la semana pasada reconociendo que era incapaz de elaborar unos presupuestos coherentes a causa de la situación política, el mismo día que la agencia «Fitch» bajó la calificación del país. Según han declarado analistas del banco alemán Commerzbank, el mercado da por hecho que las autoridades de Kiev tendrán que reconocer su incapacidad de atender a sus obligaciones financieras en cuestión de meses. En el último año la producción industrial ha caído más del 26 por ciento. Las previsiones son de una caída del 9 por ciento de la economía este año y la divisa local, la «hryvnia», puede perder el 50 por ciento de su valor antes del verano.
Un Estado fallido
En círculos de la diplomacia comunitaria se ha llegado a hablar de la posibilidad de que Ucrania se encamine a un esquema parecido al de un Estado fallido. Otros aseguran que el Alto Representante para la política exterior común, Javier Solana, estaría «muy decepcionado» con el rumbo que han tomado los dirigentes ucranianos, que ha echado por tierra todos los esfuerzos que desplegó Europa a finales de 2004, durante la llamada «revolución naranja».
En los análisis de los diplomáticos y los expertos financieros, el enfrentamiento entre el presidente, Viktor Yushenko, y la primera ministra, Yulia Timoshenko, constituye uno de los factores peor valorados. Según un experto del HSBC citado por «European Voice», Yushenko «podría usar su influencia para que la jefa del Gobierno no pueda cumplir sus obligaciones, aún a costa de impedir la llegada de préstamos».
El Fondo Monetario Internacional ha ofrecido un crédito de 16.000 millones de dólares para evitar la bancarrota, pero no ha obtenido las garantías de que el Gobierno reducirá sus gastos, y menos ante la proximidad de un período electoral.

Ucrania amenaza al embajador ruso con expulsarle del país por sus declaraciones sobre el conflicto del gas

Ucrania advirtió hoy al embajador ruso, Viktor Chernomyrdin, que podría ser expulsado del país por sus "declaraciones nada diplomáticas y muy negativas" sobre la disputa del gas que mantuvieron ambos países, reza un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores ucraniano.
Chernomyrdin fue convocado a una reunión con el ministro de Exteriores, Volodymyr Ohryzko, quien le informó de la situación. "Le dejamos claro que la postura del embajador va en contra de lo establecido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas. Lo que ha hecho supone una violación de las normas, de la ética diplomática y de la ley internacional, y es incompatible con el papel de representación diplomática en un país", declaró el Ministerio.
Asimismo, asegura que los consulados generales de Rusia en las ciudades ucranianas de Járkov y Odessa también han violado lo establecido en la convención de Viena, según informaciones de RIA Novosti recogidas por Europa Press.
Chernomyrdin no ha actuado correctamente respecto al conflicto del gas entre ambos países ya que "ha criticado en repetidas ocasiones la posición de Ucrania durante la disputa". En particular, en una entrevista emitida el pasado enero el diplomático consideró la situación del tránsito de gas vía Kiev de un movimiento "sin sentido" y alegó que "todo deriva del liderazgo de Ucrania". "Independientemente de si son conscientes o no, lo están haciendo a propósito", declaró Chernomyrdin.
Rusia suspendió el suministro de gas a Ucrania el pasado 1 de enero después de que éste no cumpliera el nuevo contrato establecido para el suministro de gas, según informa la citada agencia.

La nieve y el frío reciben al equipo

Tras cuatro horas de viaje en vuelo chárter, la expedición del Valencia llegó al aeropuerto de Kiev cuando arreciaba la nieve y la temperatura apenas superaba los cero grados. El grupo había partido en torno a las nueve de la mañana. En la capital de Ucrania les recibió un frío intenso y, a pesar de que a primera hora de la tarde cesó la nieve, las previsiones meteorológicas anunciaban para hoy mayor riesgo, aparte de que a la hora del partido (seis de la tarde hora española) se prevé que el mercurio de los termómetros descenderá a tres o cuatro grados bajo.Soriano reaparece. El presidente del Valencia, al que los futbolistas esperaban el lunes en Paterna para que les ofreciera las pertinentes explicaciones por la demora en el pago del primer plazo de las fichas -en su representación suya lo hizo el vicepresidente Fernando Gómez-, reapareció al frente de la expedición a Kiev. El mandatario estuvo rodeado de sus consejeros más fieles: Miguel Zorío, Marcos Martínez, Vicente Silla y García Roig. Ninguno de los más críticos viajó a Ucrania.Morbo y vigilancia. Todos los enviados especiales no quitaron ojo de los movimientos del presidente, tanto en la terminal de Manises como durante el vuelo. Existía morbo por presenciar el encuentro cara a cara con algunos jugadores, pero todo discurrió con absoluta normalidad y no entabló conversación con ninguno de los futbolistas.Un gol de Morientes. El delantero cacereño es el único valencianista que sabe lo que es ganar y marcar en el estadio Valery Lobanovsky, en el que el club de Mestalla nunca ha jugado. Fernando Morientes lo hizo hace casi diez años, en noviembre de 1999, cuando estaba en las filas del Real Madrid. Anotó uno de los goles del triunfo de su equipo (1-2) en partido de la Liga de Campeones. Además, también como madridista, jugó en otras cuatro ocasiones con un balance de una derrota y tres empates.Edu se queda con las ganas. El brasileño, que también conoce el estadio ucraniano, se quedó con las ganas de acudir, pero se lo impidió la rotura de fibras que sufre en el sóleo de la pierna izquierda y de la que se recupera satisfactoriamente. Él jugó y perdió 2-1 en la liguilla de Champions cuando militaba en el Arsenal inglés, club que acabó superando la rondaTres advertidos. Albelda, Villa y Hugo Viana afrontaron el viaje a Kiev conscientes de que si juegan y vieran una tarjeta amarilla, serían sancionados.Unibet apuesta por el rival. Según los expertos de Unibet -que patrocina al Valencia- el duelo de hoy se saldará con una victoria del equipo local. Las cotizaciones sitúan la victoria del Dinamo en 2,55 por euro apostado, aunque jugadores y expertos no se decantan por un partido con muchos goles.Una futura peña rusa. El entrenamiento contó con la presencia de más de 20 aficionados valencianistas procedentes de distintas zonas de Ucrania y de Rusia (Minsk, San Petesburgo, Moscú, Rostov y Kaliningrado) que tienen previsto componer una futura peña del Valencia que ya está en trámites para ser oficial.

CE dispuesta a discutir apoyo a economías del Este y admite su preocupación

Bruselas, 18 feb (EFE).- La Comisión Europea admitió hoy su preocupación por la situación crítica que atraviesan las economías de Europa del Este y los bancos extranjeros con presencia en la zona y recalcó su disposición a dialogar sobre posibles ayudas, aunque subrayó las diferencias entre los distintos países.
Así respondió el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, al ser preguntado por la propuesta del Gobierno austríaco para que la UE facilite ayuda financiera a los países de Europa del Este, miembros de la UE o no, más castigados por la crisis.
En Austria está aumentando la preocupación por la gran exposición de sus entidades en los países del Este del continente, como Rumanía, Hungría y Ucrania.
La agencia de calificación Moody's advirtió ayer de que estudia rebajar la calificación de los bancos con filiales en la zona, lo que afecta a entidades de Austria, pero también de Francia, Italia, Bélgica, Alemania y Suecia.
Almunia aseguró hoy que comparte la preocupación por la complicada situación de las economías ex-soviéticas y de los bancos con presencia en la zona, pero subrayó que hay muchas autoridades que deberían implicarse en la cuestión.
Aludió, en concreto, a los gobiernos de los países afectados, tanto de dentro como de fuera de la UE, los organismos supervisores, las instituciones financieras multilaterales como el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, el Banco Mundial y el Banco Europeo de Inversiones, la Comisión Europea y la UE.
También hizo hincapié en las diferencias entre países que son socios de la UE, como Rumanía y Bulgaria, los candidatos a la adhesión, como Croacia, y otros como Serbia y Ucrania.
"No podemos dar a todos el mismo tipo de apoyo", explicó Almunia, que incidió en que los instrumentos de asistencia disponibles son diferentes en función de la vinculación a la Unión.
La UE ya ha concedido sendos créditos, en operaciones conjuntas con el FMI, a Hungría (6.500 millones de euros) y Letonia (3.100 millones) para ayudarles a superar la crisis financiera y ha elevado de 12.000 a 25.000 millones de euros el límite de asistencia financiera que la UE puede ofrecer a los países de fuera de la zona del euro.
Almunia dejó claro, en cualquier caso, que desde la Comisión "estamos listos para dialogar" con los países afectados directa e indirectamente por la crisis en Europa del Este.
También el viceprimer ministro checo, Alexander Vondra, se refirió hoy, en nombre de la presidencia de turno de la UE, a la propuesta austríaca de habilitar un paquete de ayudas -que podría ascender a 150.000 millones de euros, según informaciones no confirmadas por Viena- para las economías del Este.
Vondra opinó que, en este momento, no hay base para ese tipo de medidas extraordinarias, según declaraciones recogidas por la agencia APA.
El mandatario checo admitió que los bancos presentes en la región tienen problemas, pero señaló que no son los únicos que afrontan dificultades derivadas de la crisis financiera.

Platini confía en Ucrania y Polonia para organizar la Eurocopa-2012

Michel Platini, presidente de la Unión Europea de Fútbol (UEFA), dijo estar "convencido de triunfar en la apuesta de la Eurocopa-2012 con Ucrania y Polonia" durante el discurso que pronunció el miércoles en Bruselas, ante el Parlamento Europeo.
El francés recordó no obstante a esos dos países que "siguen bajo la amenaza de una espada de Damocles" después de que el comité ejecutivo de la UEFA decidiera hace un mes exigir "la construcción dentro del plazo de los dos principales estadios de Kiev y Varsovia".
El presidente de la UEFA ya había puesto esa exigencia como "condición sine qua non" para mantener la competición en esos dos países.
Según la UEFA, en mayo se efectuará la próxima evaluación aunque, según declaró el miércoles a la AFP su portavoz, William Gaillard, "una serie de expertos siguen la situación de cerca en todo momento".
"Hemos aceptado el reto de organizar nuestra principal competición, el campeonato de Europa de naciones, en dos países que nunca habían organizado un evento de esta magnitud. Y vamos a superar este reto", insistió Platini.
"Sin duda hay temores. Pero la construcción de infraestructuras avanza. Y sabemos que los gobiernos de los dos países pueden financiar el proyecto. Salvo en caso de gran catástrofe, no tendremos que tomar la decisión de retirar la Eurocopa a esos dos países", agregó Platini.
Desde hace meses crecen las dudas sobre la capacidad de Polonia y Ucrania para cumplir con sus compromisos, sobre todo en cuanto a la construcción de los estadios y a la renovación de las infraestructuras en materia de transporte y hostelería.

Uruguay busca en Ucrania la venta de carne que ha perdido en el mercado ruso

Los administradores del Instituto Nacional de Carnes de Uruguay (Inac) le harán llegar al Ministerio de Ganadería y Agricultura del país vecino los lineamientos que deberían contemplar un acuerdo sanitario con Ucrania para vender allí la carne bovina.
Sucede que al desplomarse el mercado ruso, a partir de la profundización de la crisis financiera mundial, los frigoríficos uruguayos buscan recuperar parte del posicionamiento perdido en el mercado ucraniano. Así lo indicó El País.
Los mataderos orientales intentarán posicionarse en el segmento gastronómico del mercado ucraniano, que actualmente es ocupado en buena medida por Brasil (de hecho, en el vecino país operan los grupos brasileños Marfrig y Bertin).
La cónsul honoraria de Ucrania llegará a Uruguay durante los primeros días de marzo próximo y los titulares del sector cárnico pretenden que para entonces el gobierno oriental tenga listo un acuerdo sanitario marco para permitir el ingreso de los cortes uruguayos en la plaza ucraniana.
“Ucrania es un mercado muy interesante para el vacuno, básicamente para productos de precios medianos; entrar en este destino es como ampliar Rusia hacia el Este", aseguró Marcelo Secco, gerente del Grupo Marfrig en Uruguay.
Secco admitió que en 2009 difícilmente la Federación Rusa volverá a tener el mismo potencial como comprador que mostró en los últimos dos años. “Hoy ese país tiene un sistema financiero que no tiene definido quién queda y quién no; todavía tiene una crisis de bancos y el gobierno aún no puede tomar cartas en el asunto”, explicó.
Por otra parte, el gobierno ruso devaluó su moneda en torno a un 50% en los últimos meses y eso provocó un encarecimiento del dólar que desestimula las importaciones. De todas maneras, “hay que seguir trabajando a pesar de la coyuntura y apostar a los nichos de alto valor”, aseguró Secco. En lo que va de 2009 (al 7 de febrero pasado) las exportaciones uruguayas de productos cárnicos bovinos fueron de 24.641 toneladas (peso producto), una cifra 20,7% inferior a la registrada en el mismo período del año anterior, según los últimos datos difundidos por el Instituto Nacional de Carnes (Inac). La mayor parte de esa caída se explica por el derrumbe de los envíos realizados a la Federación Rusa. En tanto, en enero pasado las ventas de productos cárnicos bovinos brasileños a Ucrania fueron de 300,14 toneladas versus 787,7 toneladas en el mismo mes de 2008, según datos oficiales (MDIC/Secex) del vecino país. Los productos cárnicos bovinos argentinos están habilitados para ingresar al mercado ucraniano, aunque en el último trimestre de 2008 las ventas de cortes frescos a ese destino fueron de apenas 26 toneladas, según los últimos datos difundidos por Senasa.