Cuando el modisto Karl Lagerfeld conoció a la ucraniana Daria Werbowy de inmediato la convirtió en una de sus modelos fetiche.
Durante tres temporadas consecutivas la joven fue la estrella de sus desfiles. El genio creativo detrás de Chanel no pudo encontrar un mejor sobrenombre para ella, la llamó “La Divina”.
A sus 25 años, la castaña de ojos felinos y medidas perfectas posee uno de los rostros más cotizados del mundo y gracias a su contrato con Lancôme, actualmente es imagen de su nuevo perfume, Hypnôse Senses.
En últimas fechas Daria se ha alejado un poco de las pasarelas, pues ha preferido invertir su tiempo en las campañas publicitarias que estelariza para firmas cosméticas y de moda.
Tan sólo en 2007 tuvo un ingreso cercano a los 3.5 millones de dólares.
Sus orígenes
Daria es hija de un ingeniero y una profesora. Nació en Ucrania el 19 de noviembre de 1983 y sólo tiene dos hermanos, Orest y Oksana.
Cuando tenía tres años, su familia se mudó a Mississauga, un suburbio ubicado en Toronto, Canadá.
De pequeña nunca soñó con ser modelo ni con desfilar en una pasarela, más bien era una niña muy normal; jugaba y asistía a la escuelas como todas. Ingresó a la Escuela Primaria de Santa Sofía y a la secundaria Cawthra Park.
A los 14 años, y a pesar de que todavía no alcanzaba el 1.81 metros de estatura que tiene hoy en día, durante una fiesta en el jardín de un vecino llamó la atención de una persona que trabajaba en la agencia de modelos canadiense Susan J. Model & Talent.
Esta persona era un antiguo amigo de su madre. Luego de insistir un poco, convenció a la adolescente de probar suerte en el mundo del modelaje, vaticinándole gran éxito.
No estaba equivocado. Ese mismo año, la chica de ojos color azul-gris ganó el Top Overall Model, un concurso nacional de modelos, gracias al cual pudo contratarse con la agencia Elite Model Canadá, iniciando así su exitosa carrera.
Un año más tarde ya era la imagen de varios catálogos nacionales de ropa, para los cuales trabajó los tres años siguientes con gran éxito.
En 2001, “La Divina” se contrató con la prestigiosa agencia IMG, por lo cual se tuvo que mudar a la ciudad de Nueva York. Comenzó a cosechar los primeros frutos de su éxito: consiguió ser la imagen de la portada de la versión canadiense de la revista Elle y de la conocida revista de moda Fashion Toronto.
Un parteaguas
Su vida en La Gran Manzana parecía ir de maravilla cuando ocurrió el atentado contra las torres gemelas. Debido al caos que había en Nueva York, decidió volver a Canadá con sus padres y poner un alto a su trabajo como modelo.
Los momentos de crisis que vivió hicieron que no se sintiera lo suficientemente fuerte y segura de sí misma para continuar su carrera.
Para fortuna de sus millones de admiradores, tras pensarlo mucho, en 2003 decidió volver al mundo de la moda.
Justamente tres días después de su regreso desfiló para Marc Jacobs y una semana más tarde se convirtió en imagen de Prada. Ese mismo año estuvo en las pasarelas de Versace, Gucci, Prada, Givenchy y Chanel, lo que le brindó la oportunidad de conocer a Lagerfeld.
Pronto comenzó a aparecer en las portadas de las revistas de moda más importantes. Fue la de Vogue Italia, que fotografió el famoso Steven Meisel, la que la consagró de manera definitiva.
De 2003 a 2005 desfiló en más de 60 ocasiones, estableciendo todo un récord al abrir y cerrar más pases de moda en una sola temporada.
Durante esos años, además de las campañas de firmas como Prada y de ser imagen de su perfume, también lo fue de Gucci, Chanel, David Yurman, Missoni y Zara.
Fue en 2005 cuando firmó uno de los contratos más importantes y jugosos de su carrera, al convertirse en imagen mundial de Lancôme.
Desde 2006 sus apariciones en las pasarelas han disminuido considerablemente, limitándose a colaborar con Roberto Cavalli, Gucci, Valentino, Marc Jacobs y, por supuesto, Chanel.
En 2007 la reconocida revista Forbes la coloca en el noveno sitio del listado de las modelos con mayores ingresos en el mundo, en la que también estaban incluidas Karolina Kurkova, Natalia Vodianova, Carolyn Murphy, Alessandra Ambrosio, Adriana Lima, Heidi Klum, Kate Moss y Gisele Bündchen.
Las personas cercanas a Daria la describen como una persona centrada y madura quien gusta de cocinar con su mamá en la cena de Navidad.
Aunque todavía no piensa en el retiro, ya tiene definido que hará con el dinero que ha ganado hasta el momento: creará una empresa de diseño de interiores o abrirá una galería de arte.
Por cierto, lo del arte no es un capricho, Daria empezó a estudiar Bellas Artes cuando vivió un tiempo en Europa.
Contrario a lo que hacen muchas chicas de su edad, ella no invierte su tiempo en fiestas ni en recorrer tiendas.
Una de sus mayores aficiones es navegar, actividad que le gusta desde que era niña. Utiliza esas travesías para desconectarse y reflexionar.
