jueves, 3 de diciembre de 2009

Shevchenko sale ileso de un accidente de tráfico

Andrey Shevchenko resultó ileso después estar involucrado en un accidente automovilístico, según informó la prensa local.

El delantero de 33 años, elegido el futbolista del año en Ucrania en seis ocasiones, conducía su Porsche cuando se estrelló con un Honda a no mucha distancia del centro de la capital, informaron las principales webs del país.

Las fotografías publicadas en las páginas en internet mostraron a Shevchenko a lado de su Porsche negro, que presentaba una abolladura en el costado.

Shevchenko, que fuera elegido jugador del año europeo, volvió en agosto al Dínamo de Kiev, el club en el que saltó a la fama, tras 10 años en el AC Milan y Chelsea.

Suiza quiere hacer olvidar su papel en la última Eurocopa

Estimulada por el éxito de sus menores, del equipo sub 17 en Nigeria y por la solvencia con la que obtuvo su pasaporte en la fase de clasificación, Suiza afronta en Sudáfrica su su novena participación mundialista centrado en paliar el gris papel desarrollado en la última Eurocopa, donde compartió con Austria la condición de anfitrión.

Carece de trascendencia internacional el combinado helvético, que fija sus logros en los octavos de final obtenidos en Estados Unidos 1994 y Alemania 2006. En el torneo germano, no recibió un sólo gol en los cuatro partidos que disputó y que abandonó por el lanzamiento de penaltis ante Ucrania. Es el único equipo en la historia de un Mundial imbatido en el transcurso de un torneo.

Suiza encara en Sudáfrica su segunda presencia consecutiva de la mano del prestigioso preparador alemán Ottmar Hitzfeld, que asumió las riendas del combinado helvético en lugar de Jakob "Köbi" Kuhn, que abandonó el puesto después de siete años, tras la sombría actuación en la Eurocopa.

La presencia de Hitzfeld, otrora preparador del Grasshoppers helvético, donde estuvo siete años antes de acudir a la llamada del Borussia Dortmund y Bayern Munich, ha dotado de carácter a Suiza, aún sostenida por emblemáticos futbolistas conjuntada con la savia nueva que proporcionan las categorías inferiores.

En este nivel, los suizos lograron hace un mes el mayor éxito de su historia con la conquista del Campeonato del Mundo sub 17, en Nigeria, tras superar en la final al conjunto anfitrión, hasta ese momento campeón.

Entre sus jugadores más destacados, está el delantero de origen tunecino Nassim Ben Khalifa, jugador del primer equipo del Grasshopper.

El cambio generacional impuesto por Hitzfeld ha sido paulatino pero evidente. En la portería, por ejemplo, terminó con la trayectoria de Pascal Zuberbühler en lugar de Diego Benaglio, que asumió la responsabilidad en la meta durante el trayecto hacia el Mundial, en el que Suiza quedó primero de su grupo.

El cuadro helvético saldó con seis victorias, tres empates y una derrota su paso por la fase de clasificación. Sólo cayó ante Luxemburgo, en la segunda jornada. Y superó en la tabla a Grecia, que tuvo que ganarse su puesto mundialista en la repesca.

Los defensas Stephan Lichtsteiner, del Grassophers, Phillip Senderos, del Arsenal, Stéphane Grichting, del Auxerre; los centrocampistas Benjamin Huggel, del Basilea, Tranquillo Barnetta, del Bayer Leverkusen, Gokhan Inler, del Udinese italiano, o el futbolista de origen turco, Hakan Yakin, del Lucerna y los delanteros, como el atacante del Twente, de origen congoleño Blaise N'Kufo, un fijo, Eren Derdiyok, del Bayer Leverkusen o el veterano Alexander Frei, del Basilea, forman la base del equipo de Hitfield, que también ha contado notablemente con jugadores como Christoph Spycher, defensa del Eintracht Francfort, Gelson Fernandes, centrocampista del Saint Etienne, Johan Vonlanthen, de origen colombiano, el zaguero Ludovic Magnin, del Stuttgart o Marco Paladino.

Una “guerra necesaria” por un gasoducto

Actualmente 68.000 soldados de EE.UU. y 42.000 soldados aliados ocupan Afganistán, aliados con señores de la guerra de la Alianza del Norte y el corrupto y débil régimen de Karzai en Kabul. Es obvio que el presidente Obama desea aumentar ese número y anunciará ante una audiencia de cadetes de West Point el martes que agregará más de 30.000 y que presionará a los europeos para que agreguen otros 10.000. Esto llevará el número total de fuerzas de ocupación, aproximadamente, al nivel del despliegue soviético en su apogeo de los años ochenta.Los soviéticos trataban de proteger al gobierno secular en Afganistán y de desalentar el fundamentalismo islámico, una amenaza potencial para repúblicas soviéticas centroasiáticas vecinas, como Uzbekistán. ¿Qué trata de hacer Obama?

Pero, que no quepa la menor duda, ahora es la guerra de Barack Obama. Con este anuncio habrá aumentado personalmente la fuerza en Afganistán en más de 50.000 soldados como respuesta a los pedidos de sus generales.

El mantra de Obama sobre el conflicto en Afganistán es que se trata de una “guerra por necesidad”. Pero en realidad esto sólo es una versión del tropo neoconservador de la “Guerra contra el Terror”, lo que quiere decir que implica que es la respuesta natural y razonable en represalia por los ataques del 11-S. (‘Ellos’ la comenzaron, después de todo, de modo que tenemos que llevar la guerra a ‘ellos’.)

Pero la estrategia neoconservadora siempre ha requerido la refundición simplista de fenómenos dispares y la explotación de la ignorancia y el temor públicos en la ejecución de la política. ¿Quiénes son ‘ellos’, después de todo? La invasión de Iraq necesitó la Gran Mentira de que Sadam Hussein tuvo algo que ver con el 11-S. La anterior invasión de Afganistán necesitó el astuto acto de prestidigitación según el cual al Qaeda, sobre todo árabe saudí pero internacional, fue identificada con los talibanes, puramente afganos. “No distinguimos entre terroristas y los gobiernos que los apoyan,” declaró Bush.

Fue casi un alarde de que EE.UU. sería atrevidamente ignorante como asunto de política pública, y una advertencia a los racionalistas empíricos del mundo de que la Casa Blanca estaba en manos de mentes verdaderamente simplistas y que por cierto explotaría a su gusto desvergonzadamente la islamofobia popular incluso mientras hacía estudiados gestos públicos en apoyo a la tolerancia religiosa. (El mensaje calculado era: ¡Ten miedo, mundo, porque el poder está en manos de vaqueros, y diablos, podemos volvernos medio locos cuando nos enfurecemos!)

El hecho es que hubo y hay una diferencia entre al Qaeda, una organización yihadista internacional que quiere restablecer un califato global y enfrentarse a EE.UU., y los talibanes, que querían estabilizar Afganistán bajo una interpretación dura de la sharía pero mantener una relación de trabajo con EE.UU. Y ahora, ocho años después de ser derrocados, los talibanes vuelven de verdad, demostrando que tienen una verdadera base social. Además, los talibanes paquistaníes han emergido al otro lado de la frontera como consecuencia directa de la invasión de EE.UU.

Una serie de informes de inteligencia han señalado lo obvio: que más tropas sólo generan más “insurgencia”.

El consejero nacional de seguridad de Obama, general James Jones, lo dijo bien claro: “La presencia de al Qaeda [en Afganistán] ha disminuido considerablemente. El cálculo máximo es de menos de 100 que operan en el país, sin bases, sin la capacidad de lanzar ataques ni contra nosotros ni contra nuestros aliados”. Si existió una “necesidad” de destruir a al Qaeda en Afganistán, ese asunto ha sido liquidado. ¿Qué piensa Obama que hay que lograr ahora?

Me imagino que argumentará que no se debe permitir que los talibanes vuelvan al poder. ¿Pero no significa eso implícitamente reconocer que tienen raíces genuinas en la sociedad afgana, particularmente en la sociedad pastún? Los mejores cálculos militares estiman la cantidad de militantes talibanes en no más de 25.000, y los combatientes bien armados en cerca de 3.000. Hay unos 100.000 soldados en el Ejército Nacional Afgano (ANA) aparte de todas las tropas extranjeras de ocupación. Los soldados del ANA son descritas a menudo como de “pobre calidad”, queriendo decir que son analfabetos, y sobre todo atraídos por el dinero. Pero los talibanes también son generalmente analfabetos y muchos de ellos también combaten sobre todo por la paga. ¿Por qué hay provincias enteras como Nuristán que han caído bajo control talibán a pesar de todo el personal de contrainsurgencia?

¿Por qué al intentar “asegurar” la provincia Helmand en una ofensiva contra los talibanes durante el verano descubrieron las fuerzas de EE.UU. que sus aliados del ANA casi no incluían pastunes sino que eran desproporcionadamente tayikos? ¿Por qué las fuerzas de EE.UU. no lograron desplazar a los talibanes de Marjeh, una ciudad de unos 50.000 habitantes y centro del tráfico de opio?

El problema no es la falta de soldados. Si ese fuera el caso, la creciente cantidad de soldados durante los últimos años habría producido una situación mejor, no peor, de la seguridad. El problema es la premisa de que los imperialistas puedan recolonizar un país so pretexto de contraterrorismo, contrainsurgencia o liberación contra una resistencia masiva.

¿Pero por qué está tan determinado Obama a perseverar en Afganistán? ¿Qué es tan importante en la política afgana que el Hombre del Cambio no puede cambiarla, incluso cuando un 57% de la gente en EE.UU. dice que hay que irse?

El martes por la noche dirá, de un modo tan elocuente como él y los que escriben sus discursos pueden hacerlo, que simplemente no nos podemos permitir que unos extremistas islamistas vuelvan al poder para que puedan albergar a terroristas que atacarán a EE.UU.

Pero hay que recordar que hubo una época en la cual el Departamento de Estado de EE.UU. estaba determinado a expulsar de Afganistán a un gobierno secular –un gobierno que quería educar a las muchachas y establecer clínicas locales y limitar el poder de los jefes tribales y mulás– y decidió ayudar a la fuerzas más profundamente reaccionarias en Afganistán, con Gulbuddin Hekmatyar a la cabeza, a establecer un régimen islamista alternativo. El consejero de seguridad nacional de Jimmy Carter, Zbigniew Brzezinski, pensó que la Revolución prosoviética Saur en 1978, en la cual oficiales izquierdistas del ejército afgano dieron un golpe y el Partido Democrático Popular tomó el poder, produciendo una reacción de los mulás y de los jefes tribales, representaba una oportunidad dorada de la Guerra Fría.

Incluso antes de que fuerzas soviéticas cruzaran la frontera en diciembre de 1979, la CIA estaba organizando fuerzas afganas e internacionales para desafiar al gobierno izquierdista y Brzezinski instaba a los combatientes a ver su lucha como una yihad o Guerra Santa. Esto continuó, claro está, durante los ocho años sangrientos del gobierno de Reagan. Los yihadistas ganaron, los amigos de Washington establecieron un régimen en 1993, inmediatamente se enemistaron llevando al país a una guerra civil entre tayikos y pastunes que incluyó el bombardeo de Kabul (que hasta entonces se había librado de los combates). Washington se distanció cortésmente, ya que había perdido interés debido al colapso de la Unión Soviética, y dejó que su aliado Pakistán se ocupara del lío.

Pakistán optó por apoyar a los talibanes, una fuerza que parecía atractiva aunque fuera sólo por su reputación de probidad moral frente al trasfondo variopinto de tráfico de opio y de señores de la guerra violadores de niños. La antigua primera ministra paquistaní Benazir Bhutto explicó más tarde que Islamabad tenía que apoyar a los talibanes para mantener las líneas comerciales por Asia Central. EE.UU. mantuvo su distancia con el grupo fundamentalista de la línea dura, que llegó al poder en 1996, y no estableció relaciones diplomáticas. Pero fue históricamente responsable por sus inicios y por el descenso de Afganistán al desastre de reacción medieval que comenzó con la lapidación de mujeres adúlteras en estadios de fútbol y culminó con la destrucción de los Budas de Bamiyan en 2001.

Los pecados del imperialismo de EE.UU. en Afganistán son simplemente espeluznantes. Hay que imaginar lo que podría haber sucedido si EE.UU. no se hubiera inmiscuido en los asuntos afganos desde fines de los años setenta y hubiera permitido que siguiera adelante ese experimento de gobierno secular-reformista en una sociedad musulmana altamente conservadora sin entregar miles de millones de dólares en armas precisamente al tipo de combatientes que hoy son vilipendiados como “extremistas islámicos” y “terroristas”. Podría no haber habido un movimiento muyahidín internacional coordinado por la CIA, ni se habría persuadido a un joven Osama bin Laden para que suspendiera sus estudios y dirigiera a guerreros santos árabes en coordinación con la CIA, ni hubiera habido un colapso total de la sociedad afgana, ni un “contragolpe”.

Por desgracia la gente de este país no tiene en general la menor idea sobre la reciente historia de Asia del Sudoeste y el papel de los gobiernos de EE.UU. en la producción precisamente de los problemas de los que se queja. (No incluyo a Obama entre ellos; sabe lo que está haciendo. De ahí su culpabilidad moral total.)

Los talibanes nunca invitaron a Osama bin Laden a Afganistán; estaba en el país cuando llegaron al poder, como invitado de un señor de la guerra que se había mostrado hostil a ellos. Había llegado de Sudán, expulsado por el gobierno de ese país después de una demanda de EE.UU. Los talibanes le otorgaron la hospitalidad requerida por el código pashtunwali, como señal de aprecio por sus servicios en la lucha antisoviética en los años ochenta. Pero, como Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair documentaron en CounterPunch, desde el año 2000 los talibanes iniciaron conversaciones en Frankfurt con la UE, facilitadas por el empresario afgano-estadounidense Kabir Mohabbat, para transferir a bin Laden fuera del país. Mohabbat estuvo empleado desde noviembre por el Consejo Nacional de Seguridad para negociar con los talibanes sobre la suerte de bin Laden.

Los talibanes, que habían confinado a bin Laden y a sus principales asesores a su complejo en Daronte, a 48 kilómetros de Kabul, invitaron a EE.UU. a que enviara uno o dos misiles crucero como el modo más fácil de solucionar el problema, pero el gobierno de Clinton demoró la acción. El gobierno de Bush también envió repetidamente a Mohabbat a Kabul –tres veces en 2001– para discutir el tema de bin Laden. En otras palabras, lo menos que se puede decir es que el Departamento de Estado sabía, y nosotros deberíamos saber, y Obama debiera saber, que los talibanes y al Qaeda son dos cosas muy diferentes.

De modo que si el presidente argumenta que tenemos que continuar la lucha con más tropas para reprimir a los talibanes, para impedir que Afganistán vuelva a convertirse en un centro del terrorismo internacional, va a expresar un contrasentido tanto más elocuente.

Probablemente no hablará del reciente comentario del primer ministro de Pakistán, el país que después del propio Afganistán es el país más victimizado por la agresión estadounidense en la región. Hablando en inglés, Yousef Raza Gilani dijo a los periodistas:

“Nuestra única preocupación es que si EE.UU. envía más soldados al área de Helmand de Afganistán, habrá un flujo de militantes que se irán a Baluchistán. Es la preocupación que ya hemos discutido con el gobierno de EE.UU., que hay que preocuparse de ese flujo de ‘militantes’ hacia Baluchistán porque de otra manera puede desestabilizar Baluchistán.

“Pakistán está interesado en un Afganistán estable –pero tampoco queremos que nuestro país se desestabilice-. Hemos pedido al gobierno de EE.UU. que nos consulte en caso de algún cambio de paradigma en la política… para que podamos formular nuestra estrategia correspondientemente.”

Baluchistán representa más de un 40% del área de su país. Está acosado por la intranquilidad étnica; algunos miembros de la mayoría baluchi resienten el hecho de que reciben pocos beneficios de la explotación del uranio y del cobre de su región y que son desatendidos por Islamabad. Existe una insurgencia armada dirigida por miembros de la tribu bugti. Tiene un cierto apoyo de paquistaníes educados críticos del “chauvinismo pastún” que acusan al Estado de tratar de mantener el atraso de los baluchis. (Aunque es considerado “terrorista” por el Departamento de Estado, este movimiento es un fenómeno separado de los talibanes.)

Funcionarios del Departamento de Estado han desechado las preocupaciones paquistaníes. ¿No es típico que lo hagan? Han estado desechándolas desde la invasión inicial en 2001, y a medida que Pakistán se desestabiliza cada vez más, EE.UU. simplemente repite sus demandas de más cooperación militar, continúa sus ataques con drones a través de la frontera, y persigue sus objetivos en la región en lo que Islamabad percibe como falta de atención hacia sus intereses. Pakistán tiene sus propios problemas que al parecer no son comprendidos por los responsables políticos en el Departamento de Estado de EE.UU. o ignorados intencionalmente mientras los agravan.

Y el presidente Obama no mencionará que según el sondeo 2009 de Asia Foundation, en Afganistán un 56% de los encuestados dicen que sienten cierta simpatía por las motivaciones de los grupos armados, incluidos los talibanes y el grupo de Hekmatyar, que se oponen a la ocupación. No señalará que la estrategia de relaciones públicas de presentar este esfuerzo como una “liberación” simbolizada por la eliminación de la burqa ha sido abandonada silenciosamente hace tiempo, ya que la burqa ha vuelto en fuerza y que los señores de la guerra en quienes EE.UU. debe confiar para mantener el orden siempre se han reído de las propuestas de reforma social de EE.UU. Sabe que no es el motivo por el que los soldados están en el país.

EE.UU. intervino indirectamente en Afganistán en los años 80, sin pensar en el bienestar del pueblo afgano y con trágicas consecuencias para éste, a fin de combatir a los soviéticos y a la amenaza imaginaria del “comunismo”. Para hacerlo dio alas a una feroz tendencia extremista islamista. Nunca ha habido algún reconocimiento de error o disculpa y no se puede esperar que lo haya. Todo tenía sentido en un momento desde el punto de vista imperialista de EE.UU.

¿Qué tiene sentido ahora, desde el punto de vista imperialista de EE.UU.? Basta con mirar el mapa. Darse cuenta de que Afganistán no tiene productos que el mundo corporativo de EE.UU. desee o necesite. Durante la Guerra Fría, Irán, Iraq, Turquía a veces tuvieron papeles cruciales en el pensamiento geoestratégico de EE.UU. pero Afganistán fue prácticamente concedido al campo soviético incluso antes de 1978. Sólo adquirió importancia como un campo de batalla de la Guerra Fría cuando estrategas estadounidenses se dieron cuenta (en palabras de Brzezinski) de que podían “desangrar a los soviéticos… como ellos lo hicieron con nosotros en Vietnam.” Más recientemente ha adquirido importancia cuando las corporaciones energéticas de EE.UU. se disputan globalmente con los rusos el acceso al gas natural del Mar Caspio.

Actualmente Europa depende del suministro de gas a través de Rusia desde el Mar Caspio, sobre todo de Turkmenistán. Eso da a Moscú una enorme influencia política cuando se trata de temas como la decisión de la OTAN de admitir a Georgia o Ucrania. La política de EE.UU. ha sido construir ductos desde el Caspio evitando a Rusia o Irán. La construcción del gasoducto TAPI (Turkmenistán-Afganistán-Pakistán-India) que llevará al gas directamente al Océano Índico y a los mercados mundiales ha sido retrasada considerablemente debido a los combates en Afganistán.

El gasoducto pasará por la provincia Helmand, y luego por Baluchistán paquistaní. Si todo resulta, representará una mejora muy importante en la posición geoestratégica de EE.UU. en la región, incluso en caso de otra guerra mundial (como la que podría ser provocada por un ataque de EE.UU. contra las instalaciones nucleares de Irán y las repercusiones impredecibles de una tal acción).

Pero Obama no hablará de la historia de la intervención de EE.UU. en Afganistán, o de los sentimientos del pueblo afgano respecto a la ocupación, o de las reacciones de los paquistaníes ante el tremendo desastre en su cercanía, o de las verdaderas razones geopolíticas para el interés estadounidense por esa atrasada y empobrecida nación centroasiática que ha sido “el cementerio de imperios” desde la época de Alejandro Magno.

Dirá que sigue siendo una guerra necesaria para defender a los estadounidenses contra un ataque terrorista. Debemos recordar, una vez más, la observación del criminal de guerra nazi Hermann Goering durante el juicio de Núremberg de que “naturalmente la gente común no quiere guerra… pero en definitiva son los líderes de un país los que determinan la política, y arrastrar a las personas es una de las cosas más sencillas. Todo lo que hay que hacer es decir que están siendo atacados, y denunciar a los conciliadores por falta de patriotismo y por exponer al país al peligro. Funciona de la misma manera en cualquier país.”

Deberíamos responder: ¡No, no es necesario! en las calles ese día y en los días siguientes, hasta que obliguemos a Obama a terminar lo que son ahora inconfundiblemente sus criminales guerras imperialistas.

…………..

Gary Leupp es profesor de historia en la Universidad Tufts, y profesor adjunto de Religión Comparativa. Es autor de Servants, Shophands and Laborers in the Cities of Tokugawa Japan; Male Colors: The Construction of Homosexuality in Tokugawa Japan; e Interracial Intimacy in Japan: Western Men and Japanese Women, 1543-1900. También colaboró con la despiadada crónica de CounterPunch sobre las guerras en Iraq, Afganistán y Yugoslavia: “Imperial Crusades.” Para contactos escriba a: gleupp@granite.tufts.edu

Fuente: http://www.counterpunch.org/leupp11302009.html

Putin niega apoyo a la candidatura de Timoshenko para la Presidencia ucraniana

Moscú, 3 de diciembre, RIA Novosti. El jefe del Gobierno ruso, Vladímir Putin, declaró hoy que no apoya a la candidatura de la primera ministra ucraniana Yulia Timoshenko para la Presidencia de Ucrania.

"A pesar de cooperar fructuosamente con mi homóloga ucraniana Yulia Timoshenko, no apoyo su candidatura para la Presidencia ucraniana", manifestó Putin en una sesión de preguntas y respuestas transmitida en directo por la televisión nacional.

Comunicó que en el nivel de los partidos, mantiene unas relaciones "especiales" con el opositor Partido de las Regiones de Ucrania, liderado por Víctor Yanukóvich.

Yanukóvich y Timoshenko son los principales pretendientes a la Presidencia ucraniana.

Putin celebró una reunión con Timoshenko en noviembre pasado en Yalta (Ucrania) y comentó entonces que "se sentía cómodo" trabajando con ella pero que no la consideraba un socio "fácil".

Al mismo tiempo admitió que las relaciones ruso-ucranianas llegaron a ser más estables siendo Yulia Timoshenko primera ministra.

Elecciones presidenciales en Ucrania

Las elecciones del presidente de Ucrania se celebrarán en enero de 2010.

Presidente ucraniano acusa al Gobierno de destruir el Ejército

Kiev, 3 de diciembre, RIA Novosti. El presidente de Ucrania, Víctor Yúschenko, acusó hoy al Gobierno de Yulia Timoshenko de llevar a cabo una política dirigida a destruir el Ejército nacional.

"La política que la primera ministra propone aplicar respecto a las Fuerzas Armadas ucranianas es una política de destrucción del Ejército nacional", manifestó Yúschenko en declaraciones a la prensa durante una visita a la Brigada 40 de Aviación Táctica emplazada en la población de Vasilkov (provincia de Kiev).

Según el mandatario ucraniano, el presupuesto de Defensa se ejecuta a un 30% o menos mientras la financiación de las Fuerzas Armadas está por debajo del 1% del Producto Interior Bruto (PIB), lo cual, en opinión de Yúschenko, contradice los intereses nacionales.

El presidente ucraniano aprobó la víspera una resolución del Consejo de Seguridad y Defensa que prevé un importante aumento de financiación de las Fuerzas Armadas.

El próximo 17 de enero, el presidente Víctor Yúschenko y la primera ministra, Yulia Timoshenko, disputarán en las urnas el cargo de jefe de Estado. No obstante, los sondeos de opinión dan como favorito a otro aspirante a la presidencia, Víctor Yanukovich, líder del opositor Partido de las Regiones.

Elecciones presidenciales en Ucrania

Brasil planea comprar en Ucrania radares, lanchas y blindados

Kiev, 3 de diciembre, RIA Novosti. Brasil planea adquirir en Ucrania "radares, lanchas militares y equipos blindados", reveló hoy una fuente ucraniana próxima a las negociaciones entre ambos países.

El experto Serguei Zgurets, del Centro ucraniano de estudios sobre el Ejército, la reconversión y el desarme, da crédito a esta información. "A Brasil podrían interesarle nuestros radares tridimensionales", señaló en unas declaraciones al diario Kommersant Ukraina. También calificó de "bastante probable" el suministro de carros de combate Oplot y blindados ligeros BTR-4 a Brasil.

De momento, se desconoce el importe de estos contratos pero Zgurets piensa que lo más importante es afianzarse en un mercado tan prometedor como Brasil. "Si lo conseguimos y nuestros equipos no defraudan las esperanzas de la parte brasileña, podremos obtener contratos multimillonarios en el futuro", dijo.

El mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, cumple estos días una visita de Ucrania. Su anfitrión ucraniano, Víctor Yúschenko, declaró ayer que ambos países son "socios estratégicos" y pretenden entre otras cosas desarrollar la cooperación militar técnica.

Brasil y Ucrania planean lanzar un cohete

Luiz Inacio Lula da Silva dijo ayer que esperaba para el próximo año el lanzamiento del cohete transportador de satélites Cyclone-4 en conjunto con Ucrania, antes del término de su mandato. El Presidente de Brasil, cuyo segundo período presidencial concluirá el 31 de diciembre de 2010, hizo la declaración durante una reunión con su par de Ucrania, Víktor Yúshchenko, en el marco de una visita oficial a ese país.

El Cyclone-4 despegará del Centro de Lanzamiento de Alcántara, en el estado brasileño de Marañón. Lula también habló sobre la presencia de comunidades de descendientes de esclavos en esa región. “Para hacer cualquier cosa allá, es necesario que hagamos un acuerdo con ellos, de la forma más democrática”.

En 2003, un accidente en Alcántara mató a 21 personas y destruyó el Vehículo Lanzador de Satélites, tres días antes de la fecha de su despegue, por el encendido prematuro del cohete. El Centro de Alcántara es la base espacial más cercana a la línea del Ecuador. Los cohetes usan menos combustible, pues aprovechan mejor las fuerzas centrífugas de la Tierra.Kiev. Reuters

Ucrania aspira a incrementar colaboración económica con Cuba

02 de diciembre de 2009, 21:23Cienfuegos, Cuba, 2 dic (PL) Ucrania está lista para colaborar con Cuba en varias ramas de su economía, incluida la energía solar, aseguró hoy en esta ciudad el diplomático de esa nación europea Vladislav Sachenko.

El jefe de la misión económica ucraniana en La Habana realizó tal afirmación durante el acto de entrega del camión número 100 modernizado este año por una empresa cubana bajo administración ucraniana.

Para Ucrania resulta muy importante este negocio mixto, indicó Sachenko en referencia al contrato bilateral firmado en noviembre de 2008 y que tiene previsto modernizar 450 camiones de la marca Kraz en un período de tres años.

Hasta 1991, año en que se desintegró el multinacional estado soviético, Cuba constituía uno de los mayores importadores de la tecnología Kraz.

En las tres décadas anteriores al colapso del socialismo en Europa del Este, la mayor de las Antillas compró unos 10 mil camiones que trabajaron en las difíciles condiciones climáticas de la Isla, precisó Sachenko.

Ya en el año 2007 Ucrania volvió a exportar automotores nuevos a la Isla y ahora se consolida la industria modernizadora conjunta entre la firma Autokraz de la nación europea y la cubana Soluciones Mecánicas (SOMEC), añadió.

Este proyecto en Cienfuegos (unos 250 kilómetros al sudeste de La Habana) estimulará a otras compañías de mi país a fomentar la cooperación con Cuba, afirmó el diplomático.

En reciente visita a esta ciudad portuaria, la embajadora ucraniana, Tetyana Sayenko, explicó el interés de su país de participar en la renovación de una flotilla de aviones cubanos (de la marca Antonov) fabricados en su país.

Recordó que las aeronaves AN, de pequeño porte, llevan varias décadas de servicio tanto en la aviación civil como agrícola cubanas.

Precisó que en la actualidad estos aviones son fabricados en grades cantidades de manera conjunta por Ucrania y Rusia y se adaptan con mucha facilidad a las condiciones del clima y las distancias en este archipiélago caribeño.

Empresa cubano-ucraniana ensambló primer centenar de camiones

02 de diciembre de 2009, 20:21Cienfuegos, Cuba, 2 dic (PL) El contrato de administración entre la firma ucraniana Autokraz y la cubana SOMEC celebró hoy en esta ciudad el ensamblaje del camión número 100 de un programa de 450 unidades, previsto para tres años.

A la arrancada simbólica del equipo que redondeó la cifra asistieron Vladislav Sachenko, jefe de la misión económica de la embajada de Ucrania en La Habana, y Serguei Solnsev, representante de la compañía europea en Cuba.

Pedro Hernández, director de la empresa por la parte cubana, señaló a Prensa Latina que la modernización de los automotores, propios para su empleo en la industria de la construcción, contempla el chasis, la cabina y el motor, entre otros componentes.

De los nuevos equipos, 10 fueron adaptados como hormigoneras y los camiones de volteo dedicados a labores en canteras cargan un volumen de ocho metros cúbicos, apuntó. Además de administrar la gestión productiva, la parte extranjera garantiza la moderna tecnología.

Por cada camión nuevo que deja de importar en el mercado mundial, la isla economiza unos 10 mil euros.

Arturo Hernández, director general del grupo SOMEC (Soluciones Mecánicas), adscrito al Ministerio de la Construcción, aseguró que el proyecto, iniciado en febrero de este año, logró revitalizar una empresa semiparalizada.

Se calcula que hasta 1991 Cuba importó desde la antigua Unión Soviética unos 10 mil camiones de la marca Kraz. La desintegración del multinacional estado interrumpió las operaciones.

La planta binacional de Cienfuegos, 250 kilómetros al sudeste de La Habana, asegura trabajo a sus similares de otras cuatro provincias cubanas, encargadas de suministrar algunos componentes.

Lula ofrece crédito para que Ucrania financie su parte del proyecto Ciclón-4

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció hoy que su país concederá a Ucrania un crédito para que ésta financie su parte del proyecto bilateral para lanzamientos de cohetes ucranianos Ciclón-4 desde la base brasileña de Alcántara.

Lula hizo esta anuncio durante su reunión con la primera ministra ucraniana, Yulia Timoshenko, en el curso de su visita de Estado a este país eslavo, donde hoy mismo celebró negociaciones con el presidente, Víctor Yúschenko, según la agencia Unian.

"Nos hemos comprometido a trabajar con nuestro Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social para que este crédito sea concedido a Ucrania. No tenemos derecho de abandonar un proyecto que está listo en un 75 por ciento", manifestó el mandatario.

Lula subrayó que su Gobierno ya ha superado los problemas con los que el proyecto Cinclón-4 se encontraba en Brasil, y confirmó su voluntad de que sea puesto en marcha el año que viene.

"Actualmente, el único problema que queda está en Ucrania, y consiste en la necesidad de financiar el 25 por ciento restante del coste del proyecto", indicó.

Timoshenko destacó por su parte la importancia que tiene para su país este proyecto de cooperación espacial entre Ucrania y Brasil y aseguró que el firme respaldo de los gobiernos y presidentes de ambas naciones es una garantía segura de su futuro éxito.

También Yúschenko afirmó hoy que durante sus conversaciones con Lula quedaron superadas todas las dificultades en el ámbito de la cooperación espacial bilateral, en cuyo marco en 2010 se efectuará el lanzamiento del cohete ucraniano desde la base de Alcántara, junto a la línea del ecuador.

Yúschenko explicó que los problemas tenían, principalmente, carácter técnico: "Había algunos asuntos relacionados con las infraestructuras, con las licencias. Temas puramente técnicos. Todos ellos han sido resueltos hoy", subrayó.

Agregó que los preparativos para el lanzamiento del Ciclón-4, el más potente y nuevo de los cohetes de esa serie, marcha de acuerdo con los planes y recordó que Ucrania y Brasil ya han realizado otros 227 lanzamientos conjuntos, sin que ninguno haya fallado.

"El proyecto Ciclón-4 une a nuestros países. Estamos convencidos de que gracias al mismo Ucrania y Brasil se afianzarán como estados dotados del tecnologías espaciales del siglo XXI", declaró además Yúschenko al participar con Lula en un foro empresarial en Kiev.

El presidente ucraniano subrayó que el Ciclón-4 es un 30 por ciento más barato que otros proyectos similares.

Añadió que, según expertos, en los próximos cinco o seis años los encargos para efectuar lanzamientos comerciales de satélites dentro de este proyecto pueden sumar unos 10.000 millones de dólares.

Lula, cuya agenda incluía además una visita a la ciudad de Dniepropetrovsk, en el este del país, para visitar la planta Yuzhmash, fabricante de los Ciclón y de otros portadores, lamentó no haber visita Ucrania hasta ahora.

"Creo que debía haber viajado antes a Ucrania, porque entre nuestros países se abren grandes posibilidades de cooperación", enfatizó durante su reunión con Timoshenko

Brasil y Ucrania salvan obstáculos del proyecto espacial Ciclón-4-Alcántara

Ucrania y Brasil salvaron este miércoles los últimos obstáculos para lanzar en 2010 satélites brasileños con cohetes ucranianos, además de concluir acuerdos para la instauración de un enlace aéreo directo y la supresión de visados turísticos, en una visita a Kiev del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, según fuentes oficiales.

Los dos dirigentes resolvieron los asuntos pendientes para el lanzamiento en 2010 de satélites mediante cohetes ucranianos Ciclón-4 desde el cosmódromo brasileño de Alcántara (norte).

"Las negociaciones de hoy permitieron resolver todos los problemas que quedaban para la realización del proyecto Ciclón-4-Alcántara", aseguró el presidente ucraniano Viktor Yushenko tras mantener un encuentro con su homólogo brasileño, durante una conferencia de prensa conjunta.

"El primer lanzamiento con un cohete ucraniano Ciclón-4 desde el cosmódromo de Alcántara tendrá lugar el año que viene", declaró.







Este programa lleva años de retraso, ya que el vuelo inaugural estaba previsto en 2006.

El cohete ucraniano pondrá en órbita un satélite brasileño, que supuestamente garantizará la seguridad de los vuelos aéreos, propondrá servicios de comunicación y hará investigaciones meteorológicas, según la prensa ucraniana.

Ciclón-4 es la versión más potente de los cohetes Ciclón, concebidos por la oficina de estudios Pivdenne en Dnipropetrovsk (centro-este de Ucrania).

Ucrania, que heredó un tercio de la capacidad industrial espacial de la antigua Unión Soviética, es un actor a tener en cuenta en el ámbito de los lanzamientos comerciales, con una parte de mercado que oscila entre 9 y 13%, según las estimaciones.

Los dos dirigentes acordaron asimismo un protocolo de intenciones sobre cooperación en el campo de la seguridad nacional.

Ya se conocen detalles del enlace aéreo directo. "Prevemos abrir el enlace aéreo dentro de seis meses, con tres vuelos semanales", afirmó el presidente ucraniano. Además se acordó suprimir los visados turísticos y de negocios entre los dos países.

"Brasil es el mayor socio de Ucrania en América Latina", recalcó el presidente brasileño.

Los intercambios comerciales bilaterales, que alcanzaron 1.000 millones de dólares en 2008, cayeron como consecuencia de la crisis económica mundial hasta 266 millones en los nueve primeros meses de 2009, según la prensa económica ucraniana.