domingo, 13 de diciembre de 2009

El coro ucraniano de 'Los Niños cantores de Kiev' actuará el 27 de diciembre en el Teatro López de Ayala de Badajoz

El coro ucraniano de 'Los Niños cantores de Kiev', considerado "uno de los mejores coros infantiles del mundo", actuará el 27 de diciembre en el Teatro López de Ayala de Badajoz bajo la dirección de Alla Sheiko.

Se trata de una oportunidad "excepcional" de disfrutar de esta agrupación "única", que se compone únicamente de integrantes masculinos, según informó la empresa Concerlírica S.L, en un comunicado de prensa.

El concierto, de una elevada "maestría musical", ofrecerá la tradición musical y cultural de Ucrania bajo una disciplina "extremadamente exigente" que le ha aportado el "reconocimiento indiscutible de la calidad".

'Los Niños cantores de Kiev' se compone de 40 voces, de las cuales 30 son niños de voces blancas de entre los 10 y los 14 años y el resto un grupo de jóvenes barítonos de entre 16 a 18 años.

El contraste con las voces infantiles enriquecerán el dinamismo del concierto, según la nota.

Ucrania, previsión para pasado mañana: DOS MILLONES Y MEDIO de infectados


Pues eso, que a ritmo de 71 mil infectados diarios, el cálculo de la cifra de personas infectadas por los patógenos del presunto ataque bioterrorista, ya superará los dos millones y medio.
Cifras oficiales del dia de ayer, viernes 11, extraídas de la web del Ministerio de Salud de Ucrania, donde no se hace distinción entre enfermos de gripe A, y enfermos de afecciones respiratorias que no son gripe A, y que han decidido llamar enfermedades respiratorias agudas de origen viral, neumonía vírica, o simplemente gripe.
Evolución de la enfermedad en un mes y trece días: desde el pasado 29 de Octubre hasta el día de ayer, viernes 11 de Diciembre.
Afectados: 2.400.147, de los cuales, 71.489 en el último día.
Hospitalizados: 142.125, de los cuales 3.399 ingresaron en el día de ayer, 123 permanecen en cuidados intensivos, y 11 necesitan ventilación artificial.
Muertos: 487, y 8 de ellos en las últimas 24 horas.

Vitali Klitschko se postula a alcalde de Kiev

El ucraniano Vitali Klitschko, campeón del mundo de los completos del CMB, será una vez más candidato a alcalde de Kiev.

Ser un deportista exitoso te da licencias que las personas comunes y corrientes no tienen. Este sábado se dio a conocer que el ucraniano Vitali Klitschko, campeón mundial de pesos completos del Consejo Mundial de Boxeo, será candidato a ocupar el puesto de alcalde de la ciudad de Kiev. ¿Cuánto sabe el temible púgil de economía, planes sociales o déficit fiscal?

No se sabe. Lo que es seguro es que su glorioso y afamado apellido arrastrará unos cuantos miles de votos por peso propio. La candidatura del boxeador de 38 años no será la primera de su historia, ya que se presentó en dos ocasiones. Anteriormente y en ambas fue derrotado por el alcalde actual, Léonid Tchernovetski.

"Intentaré conquistar otra vez la alcaldía de Kiev en 2012. Kiev es el corazón de Ucrania, la capital, y quiero demostrar cómo funciona la renovación", manifestó Klitschko y agregó que jamás se le cruzó por la cabeza el presentarse como candidato a la presidencia de su país de origen.

"En Ucrania, hay un mala ley que dice que cuando tienes dinero, eres el rey. Quiero vivir en un país donde me sienta seguro", afirmó uno de los boxeadores más exitosos de los últimos tiempos

La consultora española EMI abre nuevas oficinas en China, India y Ucrania

Madrid, 13 dic (EFECOM).- Mercados EMI, consultora española especializada en energía, ha puesto en marcha dos nuevas oficinas en Bombay (India) y Pekín, y ultima otra apertura en Kiev, para tratar de aprovechar las oportunidades de negocio que ofrece el sector energético en el sudeste asiático y en Europa central.

En declaraciones a Efe, el presidente de Energy Markets International (EMI), Jordi Dolader, aseguró que países como Rusia, la India, China, Ucrania o Turquía ofrecen al sector privado un "enorme recorrido" en áreas tan diversas como las energías renovables, la cogeneración o la sostenibilidad y el ahorro energético.

Pese al fuerte potencial de desarrollo de estos mercados, las empresas españolas corren el riesgo de "perder el tren" por el escaso interés mostrado hasta ahora por estas áreas geográficas, advirtió Dolader, quien destacó que, en cambio, las empresas rusas están dispuestas a embarcarse en nuevas aventuras empresariales para ampliar negocio fuera de sus fronteras.

El presidente de la consultora española, que ha desarrollado proyectos en más de sesenta países, destacó las oportunidades de negocio que ofrece Turquía, país que afronta "el mayor proceso privatizador del sector energético en el mundo".

Uno de los grandes atractivos de Turquía es su interés por el desarrollo de la energía eólica, para lo que, según Dolader, pretende "reflejarse" en el modelo español.

Ucrania es otro de los mercados de creciente interés para EMI, donde la consultora española elabora un estudio encargado por el Gobierno de este país para la implantación de dos líneas de transporte de alta tensión en el sur del país, y muy pronto iniciará un proyecto para la reorganización de la empresa nacional de transporte de energía eléctrica.

No obstante, el sudeste asiático representa probablemente el área geográfica de mayor potencial de desarrollo para el sector energético, indicó Dolader, quien destacó el caso de India y China por su rápido crecimiento económico y su enorme población.

De hecho, Mercados EMI acaba de abrir dos nuevas oficinas en Pekín y Bombay para tratar de aprovechar el interés de los gobiernos chino e indio por reformar e impulsar sus respectivos mercados energéticos.

EMI, especializada en electricidad, gas, petróleo, renovables y medio ambiente, presta servicios de diseño de mercados e iniciativas regionales; reestructuración y políticas energéticas; regulación y tarifas, y asesoramiento estratégico, entre otros.

También ofrece servicios de asesoramiento en procesos de privatizaciones, fusiones y adquisiciones, un área en el que ha trabajado para Endesa durante la opa sobre esta compañía presentada por Gas Natural.

EMI también trabaja con la sociedad Titulización de Activos (TDA) en la gestión del fondo de titulización del déficit del sistema eléctrico, adjudicado recientemente por el Ministerio de Industria.

La consultora prevé cerrar el año con un aumento de la facturación del 30 por ciento, hasta 10 millones de euros, y espera mantener el mismo ritmo de crecimiento en 2010.

La compañía cuenta con más de sesenta empleados y está presente en unos veinticinco países. EFECOM gv/ads/jlm

Rusos en el corazón de España

Los fríos de los Picos de Europa son poca cosa para los rusos que habitan en Liébana. Comparado con el del Cáucaso, los Urales o las riberas del Mar Negro, el clima de Liébana debe parecerles hasta caribeño. Sin embargo, su presencia en el corazón de España, allí donde hace 1.300 años comenzara la Reconquista de la Península Ibérica, no obedece en absoluto a razones climáticas. Un buen día, el modelo soviético se desmoronó y los más atrevidos decidieron emigrar en busca de nuevos horizontes. Por eso, y porque unos fueron trayendo a otros, actualmente viven en Liébana más de medio centenar de rusos.
Proceden de puntos tan distantes como Ucrania, Moldavia, Georgia o la propia Rusia, todos ellos territorios de la antigua Unión Soviética, el estado fundado por Lenin en 1917 sobre los despojos del antiguo imperio de los zares. Hoy, aquella gran nación aparece desmembrada en el mapa -hasta quince estados surgieron de las antiguas repúblicas de la URSS-, pero quienes viven en Potes se definen a sí mismos como rusos y hablan en sus casas el idioma ruso.
«Nos sentimos rusos. Si alguien nos dice que somos rusos, decimos que sí», explica Sasa, un moldavo que abandonó su puesto de teniente de la Policía y que actualmente, en Potes, dice sentirse «como en casa».
Dora, una pionera
Sasa, diminutivo de Alexander, es hijo de Dora. Su madre es mujer de fuerte carácter, emprendedora y trabajadora. Por las mañanas atiende en un bar y por las tardes ayuda en un hotel. Fue, junto con Natalia, la primera en llegar, hace diez años. A partir de entonces trajo a su hijo, a la novia de su hijo... a muchos otros. Hoy ejerce como una matriarca: es el vínculo principal entre todos los que integran la comunidad de rusos en Liébana.
Su experiencia es la de otros muchos emigrantes: «En la época soviética todos tenían un trabajo y un sueldo. Luego nos quedamos sin nada, sin dinero, sin trabajo...». Decidió venir a España y, una vez en Madrid, eligió un lugar que tuviera mar. Llegó a Santander con lo puesto y allí «encontré empleo en un anuncio». «Era para trabajar en el Hotel Valdecoro (Potes), y allí sigo», afirma. «Estaban mal las cosas. Nos quedamos sin trabajo. No ganábamos ni para comida», añade Liudmila, otra compatriota que llegó a Potes poco después que Dora.
Dora y Liudmila trabajan en la hostelería. La mayoría de ellos lo hacen. Quizá por ello son tan populares en Liébana, y tan reconocibles. Quizá por ello, también, manejan especialmente bien el idioma castellano: por la necesidad de atender a los clientes y por las muchas y frecuentes conversaciones que mantienen con ellos. Para los rusos lebaniegos, palabras como el aguadiente de orujo, el cocido lebaniego, los frisuelos o el borono no les resultan extrañas: están muy familiarizados con ellas.
Cambios políticos
Para los más jóvenes, el cambio de vida resultó mucho más sencillo. Vasili, Olga, Lilia, Elena y Alexander se encuentran en este caso. Unos llevan tres años. Otros, poco más. Y otros seis. Los últimos en llegar han sido dos jóvenes hermanos gemelos, que por su aspecto no pueden ocultar su condición eslava. Trabajan en Casa Cabo y Casa Cayo, dos típicos establecimientos de Potes.
Los cambios políticos y económicos operados en las antiguas repúblicas de la Unión Soviética a partir de 1991 resultaron determinantes en la decisión de todos ellos, de los primeros a los últimos. Inicialmente fue la caída del modelo comunista. Luego, para algunos de ellos, el proceso de separación respecto a la Madre Rusia. «Cuando cambió de Gorbachov a Yeltsin, todos decidieron separarse», aunque nadie sabe muy bien por qué ni para qué.
«Fue como una burbuja: cada república proclamó su indepencia». En el caso de Moldavia «no teníamos ni salida al mar, ni industria... sólo agricultura y viñedos». Los primeros en separarse fueron los países bálticos, que ya habían disfrutado de su independiencia en el periodo comprendido entre las dos guerras mundiales (1919-1939). Otras repúblicas, como Ucrania, Bielorrusia, Moldavia, Kazajastán, Turkemistán... siguieron sus pasos. Hoy, las sociedades moldavas, ucraniana y bielorrusa se dividen entre quienes quieren dar la espalda a Rusia y quienes miran hacia ella. En Moldavia, por ejemplo, los primeros hablan el idioma rumano y los segundos el ruso. Es un mismo país, pero con dos comunidades diferentes.
Los más jóvenes
Alexander 'Sasa', hijo de Dora, es de estos últimos. Su madre es moldava y su padre era ruso. Él nació en Kazajastán. Pero «todo era Rusia», a su juicio. Es licenciado en Derecho y fue teniente de la Policía. Cuando vino a Potes «empecé por la construcción, como todo el mundo». Hoy se ha convertido en un empresario, que importa botellas de vidrio sopladas artesanalmente. Ése mismo día, recibía un contendro con 6.000 botellas.
Olga era su novia cuando vino a España, aunque luego lo dejaron y ella, a última hora, se casó con uno de Frama (Cabezón de Liébana). Con él tiene dos hijos. El mayor se llama Tomás, pero su aspecto es el de un niño ruso, pese a su nombre. Los más jóvenes, como Olga, tienen claro que su futuro está aquí.
También Vasili es de esa idea. Vino a Potes por amistad con Sasa y, como él, en este tiempo ha venido trabajando en el sector de la construcción. Ahora está en paro, porque los emigrantes sufren la crisis económica tanto como los españoles, o más. Sus palabras son de agradecimiento a los lebaniegos. «Te sientes como en casa: cuando pasas por la calle, la gente te conoce, te saluda...», dice. También para el alcalde de Potes, que «nos ayuda mucho».
Ellos mantienen la conciencia de grupo, y se reúnen en el Bar Zodiac, y preparan comidase rusas y comparten allí las celebraciones del credo ortodoxo, pero su condición lebaniega aflora al regreso de cualquier viaje. «Cruzamos el Desfiladero y nos sentimos como en casa», afirman. Y su casa no es Rusia, sino Liébana. Ni más ni menos que en el corazón de España.