Réplica de Rusia
Me asombra profundamente leer en La Vanguardia las definiciones de mi país como diferente de lo normal y poco fiable en el ámbito energético. En realidad, Rusia está suministrando gas a decenas de países europeos desde hace 40 años y nunca ha incumplido sus obligaciones contractuales. Lo que sí es anormal es la postura de Ucrania, que ha bloqueado el tránsito de gas hacia Europa. Mientras los consumidores rusos pagan 340 dólares por mil metros cúbicos, Ucrania no aceptó siquiera el precio de 250 ofrecido por Gazprom, prefiriendo robar el gas destinado a los consumidores europeos. La Carta Energética Europea, firmada y ratificada por Ucrania, prohíbe expresamente el bloqueo del tránsito de gas incluso en caso de una disputa legal. Dejemos, pues, los juegos de propaganda y obliguemos a Ucrania a tener una conducta responsable y civilizada, algo tan necesario para Rusia como para Europa.
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