martes, 11 de noviembre de 2008

La patronal de la construcción ve que hay mercado en Rusia y Ucrania para salir de la crisis

MANUEL PAMIES ANDREU La Asociación de Promotores y Constructores de Viviendas de Torrevieja y la Vega Baja (Procosta) aseguró ayer que la crisis del turismo residencial en la comarca ya ha tocado fondo y centra la recuperación del sector en países de la antigua Unión Soviética que constituyen un mercado emergente en constante crecimiento que ya está empezando a funcionar en otros países de nuestro entorno. En este sentido, Antonio Navarro, presidente de Procosta, realizó un llamamiento a las administraciones solicitando la eliminación de las barreras administrativas existentes para obtener visados y conceder permiso de residencia a los ciudadanos de los Países del Este de Europa, así como potenciar el establecimiento de vuelos permanentes todo el año entre las ciudades más importantes de Rusia y El Altet.A modo de ejemplo, Antonio Navarro resaltó que días atrás un cliente ruso interesados en adquirir una vivienda en la zona de Guardamar del Segura, le explicó que con el objetivo de llegar hasta Alicante tuvo que pasar por Francia con el fin de obtener el visado por lograrse este trámite burocrático de forma más rápida por la Embajada de Francia o por la de Italia.Dirigentes de Procosta han visitado durante dos semanas Rusia y Ucrania donde, según Antonio Navarro, han podido comprobar de primera mano "el tremendo potencial" que se les puede ofrecer en la costa mediterránea española para captar clientes.Turismo emergentePara el colectivo de Procosta son países como Turquía, Grecia, Italia y Bulgaria, entre otros, los que se están disputando el emergente turismo ruso. De momento, estos países llevan la delantera a España, pues sus empresarios se ven favorecidos por la actuación de sus gobiernos, a la hora de facilitar a los inversores y turistas rusos la entrada de las personas y capitales necesarios para la inversión o la compra de viviendas.Por otra parte, Antonio Navarro destacó que en estos momentos, por iniciativa de unas pocas empresas de la comarca de la Vega Baja se tiene la posibilidad real de abrir "un importantísimo" mercado inmobiliario sobre todo en Rusia y Ucrania cuyas económicas se está liberalizando "a pasos agigantados y en los cuales existe un deseo importante en conocer la cultura occidental, especialmente la española".

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