Un empresario donostiarra que aspira a entrar en la política protagoniza la novela de Aguirre Franco
SAN SEBASTIÁN. DV. Un empresario de éxito, hábil e intrigante en sus negocios pero un fracasado en asuntos de familia, decide dar un golpe de efecto para proyectarse en la sociedad y entrar en la política. Contrata al equipo de Ucrania que acaba de resultar campeón en los Juegos Olímpicos de Pekín, y en base a esos hombres crea una trainera, con la intención de que, portando los colores de San Sebastián, resulte la mejor del Cantábrico. Este es el arranque de la nueva novela de Rafael Aguirre Franco, su décimo trabajo de ficción: Los ucranianos (Editorial Marge Books).
«Quisiera escribir libros más gordos, que son los que más se venden, pero a mí no me da más de mí», dijo jocoso el escritor en la presentación de ayer. Pese a que quizá sus trabajos más leídos y difundidos han sido los que menos tienen que ver con la ficción (su historia del deporte rural vasco o su trabajo sobre las sociedades donostiarras), Aguirre Franco (Donostia, 1937) lleva décadas escribiendo narrativa. Ya en 1962 ganó el premio de cuentos Ciudad de San Sebastián por Contra el paredón.
«Son tres los escenarios en los que se desarrolla la historia -dijo ayer Aguirre Franco-: Ucrania (donde cuento los sobornos para poder traer a esos remeros), Cataluña (porque el empresario Juanjo Erdocia tiene allí negocios) y Donostia.
El publicitario Iñigo Galatas hizo la introducción al escritor y la obra. Comentó que en la novela se hacían muchos guiños a personajes de la sociedad donostiarra de hoy en día y recordó que Rafael Aguirre Franco es un apasionado del remo, deporte que ha practicado durante décadas.
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