"A las 3.05 hora local de esta madrugada la entrega fue totalmente interrumpida por el gasoducto Isaccea 2, que aseguraba 4,7 millones de metros cúbicos al día", informó Boc.
"Ningún consumidor doméstico tendrá que sufrir y ningún ciudadano será afectado por el conflicto entre Rusia y Ucrania", añadió el primer ministro tras una reunión de la Comisión para Gestión de Situaciones de Emergencia.
Destacó que Rumanía asegurará su consumo de 61,5 millones de metros cúbicos diarios gracias a las existencias almacenadas en depósitos, así como con el uso de combustibles alternativos en la industria.
Boc admitió sin embargo que si las temperaturas llegan a bajar a menos -15 grados centígrados "será posible que aparezcan problemas", pero también en esta situación los equipos técnicos están preparados "para hacer frente a los retos".
Por otro lado, la compañía rumana Transgas señaló que fue cerrado totalmente el mencionado gasoducto Isaccea 2 para evitar deficiencias en el sistema y que también se tomaron una serie de medidas operativas para solucionar la crisis y equilibrar la red nacional de transporte del gas.
Rumanía asegura en estos momentos el consumo de gas con propios recursos producidos por Romgaz, Petrom y otros pequeños productores, de los depósitos subterráneos, así como de las importaciones que Rusia sigue entregando por otro gasoducto, el de Mediesul Aurit, en el noreste del país.
Normalmente, Rumanía abastece de recursos propios el 70 por ciento de su consumo de gas e importa de Rusia el 30 por ciento.
El ministro rumano de Economía, Adriean Videanu, informó que ha convocado al embajador de Ucrania para tratar sobre esta crisis.
El gasoducto Isaccea 2, cerrado hoy, está entra a Rumanía por el sureste y alimenta parcialmente a este y otros países balcánicos, mientras que el de Mediesul Aurit, en el noreste, suministra parcialmente a Rumanía antes de llevar el gas hacia Hungría y Europa Occidental.
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