Kiev, 17 sep (PL) Después de sepultar a la coalición de mayoría parlamentaria, el presidente ucraniano, Víctor Yuschenko, acusó hoy a la primera ministra Yulia Timoshenko de egoísmo y traición a los intereses nacionales.
El grupo mayoritario en la Suprema Rada que integraron las fracciones Nuestra Ucrania, Autodefensa Popular y el bloque Timoshenko cesó ayer su existencia, desde junio de 2006, tras fracasar los intentos de negociar la entrada de otras agrupaciones políticas.
La fracción Nuestra Ucrania, aliada de Yuschenko, sepultó todas las posibilidades de negociación al condicionar su regreso a la coalición a sus antiguos socios de la llamada revolución naranja (2004), el bloque de Timoshenko.
En declaraciones a la prensa extranjera Yuschenko aseguró que la crisis, otra más en el ámbito interno desde su llegada al poder en 2005, no amenaza el desarrollo de la democracia en el país.
Mis antiguos aliados eligieron lo que consideran para ellos lo más importante y no precisamente las prioridades nacionales, sentenció el mandatario al reiterar las acusaciones contra la jefa de Gabinete, en un serio pulseo con el gobernante por el poder.
Sobre las perspectivas de una salida a la crisis parlamentaria, el presidente del Centro de Investigaciones Políticas de Kiev, Mijail Pogrebinski, vaticinó un pronto anuncio de una nueva coalición entre el bloque de Timoshenko y el partido las Regiones.
En opinión del experto ucraniano a pesar de las evidentes discrepancias en la concepción de desarrollo del país y en los planos personales, Timoshenko y Víctor Yanukovich no tienen otra opción que la de negociar.
Reiteró que tal fórmula de consenso es el único camino para sortear la seria crisis política que afecta a Ucrania y socava el parlamentarismo.
Pogrebinski dio como bastante probable un acuerdo entre Timoshenko y Yanukovich para la conformación de un gobierno y una alianza en la Suprema Rada. Otra salida carece de sentido para Ucrania, remarcó.
El titular de la Rada, Arseni Yatseniuk, anunció ayer durante la sesión ordinaria del parlamento que la coalición naranja dejaba de funcionar.
Agregó que ante tales circunstancias estaría dispuesto a deponer el cargo y solicitó a los diputados hallar otra candidatura.
Yatseniuk al mismo tiempo instó a Timoshenko a abandonar el puesto de primer ministro.
En respuesta ante la prensa la jefa del Ejecutivo dijo que su gobierno trabajará por largo tiempo “a pesar de la tormenta en un vaso de agua”, en alusión a la crisis política del país.
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