Rusia ha acusado hoy a Georgia de un acto abierto de agresión, después de que la región separatista de Osetia del Sur advirtiera de que fuerzas georgianas habían matado al menos a dos personas en un ataque con morteros y granadas. El Gobierno ruso ha pedido no emplear la fuerza en la zona de conflicto.
Osetia del Sur proclamó su independencia de hecho de Georgia en 1992, después de un conflicto armado que dejó más de 2.000 muertos en los dos bandos. Rusia, que tiene fuerzas de paz en la región, ha proporcionado apoyo económico y moral a los rebeldes separatistas.
"Los incidentes militares recientes llevarán a una escalada aguda de la confrontación armada", ha dicho el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov. "Cualquier demora en el proceso de negociación podría tener consecuencias trágicas".
Irina Gaglóyeva, portavoz del Gobierno separatista, ha anunciado que en Osetia del Sur se ha decretado una "movilización general", y ha dicho que enviarán armamento pesado a la zona del conflicto en caso de que se repitan este tipo de agresiones. Georgia, por su parte, ha respondido que fueron los separatistas los que atacaron esta mañana con morteros varios poblados georgianos, y ha recalcado que sus efectivos se limitaron a responder.
Según la agencia Reuters, esta madrugada se han contado 12 explosiones en la plaza de Tskhinvali, la capital de Osetia del Sur, y se han escuchado disparos durante media hora
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