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Un año más, como desde hace ya catorce, un total de 38 niños y niñas afectados por la catástrofe de Chernóbil, ocurrida en 1986, disfrutan ya en Ciudad Real de unas vacaciones estivales de 45 días con diferentes familias de acogida de la provincia.
Gracias a la ayuda de la Asociación de Ciudad Real en Apoyo al Niño (Crean), estos pequeños procedentes de la comarca de Kiev, aún afectada por la explosión de la Central Nuclear de Chernóbil en Ucrania, pasan un periodo de recuperación y de descanso que, gracias al ambiente libre de contaminación y a una alimentación sana y equilibrada, les ayudará a mermar los graves efectos contaminantes que este desastre nuclear tiene en el organismo.
Por ello, el restaurante Casa Pepe, en Carrión de Calatrava, organizó ayer una merienda saludable y solidaria con estos niños y para todas sus familias de acogida. Según reconoció este restaurante a La Tribuna, son conocedores de lo importante que es para los niños recibir una alimentación saludable durante su estancia en Ciudad Real y por eso, no dudaron en unirse a la labor que Crean lleva a cabo con estos pequeños.
Desde Casa Pepe también destacaron que, a lo largo de estos tres años de ‘merienda solidaria’, se han sentido tan conmovidos por el cariño y los agradecimientos que reciben por parte de los niños que, al igual que las familias de acogida, no pueden evitar repetir esta muestra de apoyo hacia ellos.
Pero, además, los niños también fueron recibidos ayer por la concejala de Bienestar Social, Amparo Messía de la Cerda, que les dio la bienvenida, así como a sus familias de acogida en el salón de plenos del Ayuntamiento.
La edil reconoció el «fuerte vínculo» que se crea entre estos niños y sus familias, y prueba de ello, es que más del 80% repiten año tras año, viniendo hasta estas latitudes, ya que supone una experiencia «inolvidable» en la que se «da y se recibe mucho cariño», como no paran de decir todas las familias que no dudan en acogerlos año tras año. Y como es habitual por parte del Ayuntamiento, se les hizo entrega de unos regalos conmemorativos de Ciudad Real y un set deportivo.
Y después del Ayuntamiento, a la Diputación. Allí, el presidente de la Asociación de Ciudad Real en Apoyo al Niño, Ramón Serrano, agradeció a Ángel Caballero, responsable de la gestión del área de Servicios Sociales en la Diputación, que la institución provincial financie el viaje de estos 38 niños ucranianos para que año tras año, la labor humanitaria que realizan, pueda ser una realidad, puesto que la Diputación corre con todos los gastos que suponen los traslados de los niños ucranianos hasta Ciudad Real.
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