El equipo de la capital ucraniana, el Dinamo de Kiev, no trae buenos recuerdos al FC Barcelona. Las dos últimas visitas de los azulgranas se saldaron con derrotas abultadas. El Barça, vigente campeón de la Champions, necesita romper el gafe si quiere asegurarse el pase a la siguiente ronda.
El Barcelona no guarda buen recuerdo del Dinamo de Kiev. Ambos equipos se han enfrentado en cuatro ocasiones en territorio ucraniano, con un resultado de dos victorias para cada conjunto, pero las dos últimas han sido del Dinamo y sobra decir que la última culé data de hace 18 años.
Los ucranianos vencieron por 3-1 al dream-team que entrenaba Cruyff y donde jugaban Romario, Guardiola o Laudrup en 1993. El partido de vuelta se lo llevó el Barça y la eliminatoria también, pero el daño estaba hecho. En 1997, con Van Gaal al frente del mando, los culés se trajeron de nuevo un saco de goles 3-0 cuyo resultado les dejó prácticamente fuera de la Liga de Campeones de ese año y que por cierto terminó conquistando el Real Madrid.
Desde entonces el Barcelona no ha vuelto a pisar Kiev para medirse al Dinamo. Ahora, 12 años más tarde, con la vitola de ser el campeón de Europa y la necesidad de ganar o empatar para asegurarse su pase a octavos, el Barça busca romper el gafe de la capital de Ucrania. Como curiosidad, dice la estadística que si en el partido hay algún expulsado, sin importar el equipo que sea, beneficia al Dinamo. En las dos victorias señaladas anteriormente, los ucranianos vencieron la primera vez con 10 hombres y la segunda a un Barça con uno menos.
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