El vicepresidente destaca que el FMI no ha tenido en cuenta la rebaja de tipos en sus previsiones. -Almunia advierte de que la crisis no se solucionará hasta que se recupere la confianza
La crisis está mostrando un calado más profundo de lo que se preveía y se está trasladando de los mercados financieros a la economía real. Lo que está recrudeciendo el mensaje de los líderes políticos y líderes económicos. Así, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, ha insistido hoy que "ninguna" entidad financiera española está "en situación de riesgo" de quiebra o insolvencia como la que sufren las de otros países europeos, y ha añadido que no cree que "ninguna pueda llegar a verse en esa situación". No obstante, ha advertido de que no son inmunes y que "de mantenerse el ritmo de crecimiento de activos dudosos", en alusión a la morosidad, las entidades "tendrán un deterioro significativo en sus resultados.
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Sobre los cálculos del FMI de que España entrará en recesión en 2009 publicados ayer, Solbes ha defendido que estas nuevas previsiones no tienen en cuenta datos como la rebaja de ayer de los tipos de interés y las últimas caídas del precio del petróleo. Por tanto, ha añadido, "habrá que esperar a ver cuál es la evolución de la realidad para saber cuál es la cifra real".
El vicepresidente, durante su intervención en el segundo Foro de las Cajas de Ahorros, ha enfatizado que el sistema financiero español "dispone de una gran capacidad para prevenir y gestionar una situación de dificultad", y aunque las entidades del país "no se encuentran en una situación comprometida", el Gobierno ha decidido tomar medidas excepcionales para evitar llegar al momento "extremo" que están viviendo los bancos de otros países. Solbes ha defendido estas dos medidas -el incremento de las garantías de los depósitos y la creación de un fondo para comprar activos a bancos y cajas- como las adecuadas para este momento, además de porque siguen las recomendaciones del Ecofin -consejo de ministros de finanzas de la UE- y "respetan el principio de coordinación a nivel europeo".
En este sentido, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquin Almunia, ha asegurado hoy que si las entidades no confían unas en otras la crisis "no se va a solucionar" y ha recordado que la confianza está basada en la transparencia, que a su juicio, es "esencial" para recuperar el funcionamiento del mercado interbancario, por lo que ha reclamado medidas coordinadas.
Almunia ha reiterado en declaraciones a RNE que ésta es la crisis "más profunda" que se produce desde 1929 y que no hay soluciones "ni inmediatas ni fáciles", aunque ya se está avanzando. En cuanto a las medidas tomadas por el Ejecutivo, ha sostenido que son "tan buenas como cualquier otras" y suponen una reacción a las decisiones unilaterales tomadas por otros países. Asimismo, ha dicho que el sistema financiero español tiene "bases muy sólidas" para recuperarse cuando las condiciones se normalicen.
Almuncia rechaza las medidas unilaterales
En cualquier caso, el comisario ha subrayado también que los depósitos "no corren ningún peligro" y que "no hay que guardar el dinero debajo del colchón". A su juicio, la crisis se debe a un problema de liquidez, y dijo que España y otros países europeos han tenido que actuar porque "un Gobierno (en referencia a Irlanda) tomó una medida unilateral" que creó el sentimiento de que sus depósitos estaban más seguros. "Ha habido que reaccionar para que ninguno de los países quede atrás", ha asegurado.
En este sentido, Almunia ha apostado por actuar de forma global en el marco de la Unión Europea porque las iniciativas unilaterales "perjudican al vecino", mientras que las medidas coordinadas "ayudan a solucionar los problemas comunes".
Asimismo, el comisario se ha mostrado partidario de mejorar "más que aumentar" el control por parte de las instituciones y apostó por aumentar la coordinación entre supervisores. Almunia ha indicado que la crisis ha puesto de manifiesto que había que mejorar determinados aspectos de la vida financiera, como los productos estructurados que "no eran tan seguros como se había dicho". "No se pueden dar duros a cuatro pesetas", ha dicho antes de añadir que ese tipo de burbujas "siempre acaban estallando".
Desde España, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha vaticinado hoy que la crisis "tendrá costes para todos" y ha mostrado su "profunda convicción" de que sólo saldrán de ella quienes sean capaces de unirse, de aparcar intereses particulares y de lograr que todos "remen" en el mismo sentido. En este sentido, durante un desayuno de trabajo en el foro de Europa Press, ha advertido al líder de la oposición, Mariano Rajoy, de que se equivoca si piensa que los ciudadanos van a juzgar sólo al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, por la gestión de la crisis.
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