Los niños ya no vienen de París, más bien de Rusia y China. Al menos, los adoptados por familias de la comunidad autónoma. Las diputaciones recibieron el año pasado un total de 540 solicitudes de familias vascas para adoptar niños nacionales y extranjeros. La mayoría de las peticiones (471) demandaban niños con menos de tres años y procedentes de otros países, preferentemente Rusia, China y alguno latinoamericano. Vizcaya fue el territorio que más solicitudes registró, con 299, informa Efe.
Las estadísticas que manejan las tres diputaciones vascas, encargadas de recibir y tramitar las solicitudes internacionales, revelan que casi la mitad de los niños adoptados procede de Rusia. En el segundo lugar se sitúa China y a gran distancia siguen Ucrania y Colombia. Y son precisamente las autoridades chinas y rusas las que han puesto las mayores restricciones a las parejas demandantes. Entre otras limitaciones, las autoridades chinas no permiten candidatos solteros ni que tengan más de 55 años. Rusia también ha introducido cambios en su sistema normativo. Por ejemplo, ha revisado todas las acreditaciones concedidas a las asociaciones que actúan en este sector como intermediarias.
En el conjunto de España, alrededor de 5.000 familias solicitaron el año pasado adoptar a un niño español, pero menos de un millar han visto cumplida su aspiración. Y eso a pesar de que 30.000 menores viven en la actualidad tutelados en instituciones públicas
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