El espía profesional rumano Gabriel Grecu, que contaba con la cobertura diplomática en la embajada de Rumania en Rusia, fue expulsado del país.
El Ministerio de Exteriores de Rusia declaró protesta a la parte rumana en relación con la actividad de Grecu incompatible сon el estatus de diplomático. El espía fue detenido el 16 de agosto en Moscú in fraganti al intentar recibir información secreta de carácter militar. Grecu fue desenmascarado por completo.
Según datos del Servicio Federal de Seguridad (SFS), la Inteligencia rumana muestra interés por la situación en Moldavia y Cisdnestría, datos sobre los altos directivos y principales políticos e la república no reconocida. En cuanto a Rumania, escándalos del espionaje ocurren periódicamente. Además, agudos para ambas partes. En marzo de 2009 en Bucarest fueron arrestados un ciudadano de Bulgaria y un militar rumano que resultaron acusados de espionaje a favor de Ucrania. En aquella ocasión las autoridades rumanas declararon que su ciudadano vendía datos sobre la ubicación de las unidades de la OTAN. Ahora, parece, todo está a la inversa. El actual escándalo puede ser más sonado. Se trata no solo del reclutamiento por los servicios especiales rumanos de agentes en Moldavia entre políticos, periodistas e intelectuales. En este caso el blanco es Cisdnestría, república no reconocida, que formalmente hace parte de Moldavia. En Cisdnestría se encuentra un contingente pacificador ruso. El espía cogido con las manos en la masa, tenía un objetivo concreto, diceAlexey Martynov, director del Instituto Internacional de Estudios sobre los Estados Emergentes.
El estudio del estado real de la presencia militar rusa en Cisdnestría, o sea, el número de efectivos, lugares de su dislocación, material de guerra, condiciones de despliegue combativo, condiciones de uso del aeródromo militar de Tiráspol. Además, recogía en Moscú datos sobre los líderes de Cisdnestría que son todos ciudadanos de Rusia y sobre las personas que se ocupan profesionalmente de la problemática de esta república: en el servicio diplomático, en los departamentos militares, etc.
Hace tiempo que Bucarest muestra interés por Moldavia, Cisdnestría, así como por las provincias de Odesa y Chernóvitsy de Ucrania. Rumania no oculta que quisiera ampliar su territorio a expensas de Moldavia, incluida Cisdnestría. Con la circunstancia que en el caso dado se examina incluso una variante violenta de toma del poder. Bucarest presenta también reclamos sobre parte de Ucrania, en particular la región de Bucovina.
Pero hay también otro lado de este escándalo. Rumania es miembro de la OTAN en la que EEUU toca el primer violín. Washington asevera que no tiene una red de agentes en los países del espacio postsoviético. Alexey Martynov añade: la CIA no la necesita.
Grecu es un miembro de plantilla del servicio de espionaje de la OTAN. Es decir, Rumania, miembro de la alianza, y sus servicios especiales están integrados a los correspondientes servicios de la OTAN. O sea, los rumanos no operan por sí mismos.
Como notan con sorna los periodistas, desde el fin de la guerra fría la cantidad de servicios de espionaje que operan contra Rusia aumenta en el número de países que se suman al bloque de marras.
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