Su guarida es Windows, lo que hace muy difícil detección. Los expertos de seguridad advierten sobre sus causas, que nos son otras que robar datos bancarios. En el último mes el ladrón de Windows ha atracado a 5.000 personas, la mayoría ciudadanos europeos.
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Según informa BBC, el virus se contrae por navegación de páginas web que aprovechan fallos de seguridad en el sistema. Una vez infectado, el virus se esconde en el propio Windows, lo que hace más complicada su detección.
El virus responde a las características de rootkit, y trata de sobreescribir parte del disco duro de un ordenador llamado Master Boot Record, que se emplea para robar la información, ya que aquí es donde se ve si un ordenador está encendido y por tanto se puede acceder a él.
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